El Deportivo vuelve a demostrar en esta pretemporada el mayor de los problemas que evidenció en sus últimos años en Primera, la falta de definición.
Cierto que los partidos de verano deben considerarse tan solo como probaturas de cara al comienzo de Liga, pero los números ofensivos del Deportivo en los ocho partidos jugados hasta ahora no dejan en buen lugar al juego de ataque que tanto le gusta a Oltra. Hasta ahora, solo 10 tantos adornan el historial goleador de la pretemporada 2012, que desglosados, indican claramente las carencias del equipo.
Solo una vez el conjunto blanquiazul logró marcar más de un tanto. Lo hizo en su primer encuentro ante el Viveiro, al que venció por 0-5, con dos goles de Riki y uno de Bodipo, Jesús Vázquez y Bruno Gama. Aquel día y contra el rival más inferior parece que se acabó la pegada, porque el bagaje de los siete siguientes partidos no es muy halagüeño: cinco goles en siete partidos.
Frente a Racing Vilalbés y Ponferradina, dos solitarios tantos de Bruno Gama en el primero y de Riki en el segundo, bastaron para llevarse sendas victorias, hasta que llegó la clara derrota de Ribadeo ante el Sporting de Gijón por 4-1. Saúl marcó el tanto del conjunto coruñés, que volvió a desperdiciar un gran número de ocasiones.
Pero lo peor llega en los cuatro últimos partidos. Frente a rivales de diferente nivel como son Lugo, Paços de Ferreira, Ourense y Sevilla, el Deportivo solo consiguió dos goles, y para más inri, ambos tuvieron que llegar a la salida de un córner y gracias a un hombre que parece estar más fuera que dentro de la plantilla de este año, el canterano Insua.
Pizzi y Nelson Oliveira todavía no se han estrenado como goleadores, mientras que Riki lleva tres tantos y Bodipo uno. A falta de que llegue un nuevo hombre de ataque y de que Oltra deje de jugar al escondite y ponga a los teóricos titulares, los números no hacen pensar en que el equipo recupere una facilidad goleadora perdida hace años.