El Dépor ha dimitido de esta temporada. Durante toda la semana los jugadores y el propio entrenador hablaron de que el triunfo ante el Málaga era liberador, que se vería otro equipo ahora, que la permanencia no estaba hecha aún… palabras, sólo eso. Pocas veces un equipo habrá hecho tanto el ridículo y recibido un castigo tan leve, dejando la sensación que ya ha dejado la permanencia a la incapacidad de sus perseguidores.
El conjunto coruñés debió de confiarse en el calentamiento viendo la mañana soleada de San Sebastián, sin adivinar la tormenta perfecta que le esperaba nada más pitar el árbitro el saque inicial. Xabi Prieto estuvo a punto de hacer en 10 segundos lo que hace dos semanas logró Jovetic en 50, pero su remate de cabeza se fue ligeramente desviado en al primera jugada del encuentro.
Los de Mel no olieron el balón en los primeros diez minutos y el encuentro se jugó en el área de un Lux que veía pasar el balón de un lado al otro desesperado. Pronto se dieron cuenta los locales que el ritmo con el que habían empezado era suficiente, un entrenamiento con público en el que la duda era el cuándo marcarían y no el si lo harían. Mientras tanto, el Dépor trataba de achicar agua y amenazar con alguna contra que no llegaba por la imprecisión de sus hombres de ataque, especialmente reflejada en Çolak, que apenas dio un pase bueno.
Pero no sólo faltó calidad, algo posiblemente ya irremediable este año, sino que la tensión defensiva también dejó mucho que desear. Como muestra, el gol que abrió el marcador. En una situación de tres contra dos favorable a los coruñeses en la banda izquierda, Juanfran y Fayçal pensaron que la mejor forma de marcar a Yuri era mirarlo intensamente desde unos cuatro metros. El resultado sorprendente fue un centro medido del lateral donostiarra a la cabeza de William José, que llegó a la cita con el balón media hora antes de un Sidnei que no se ha presentado en este 2017.
A pesar de la dejadez deportivista el resultado no se movió, pero ni eso despertó a un Dépor que continuó con el esperpento tras el descanso. La Real seguía atacando al tran-tran sin que nadie en la zaga coruñesa encontrase la manera de capear el temporal. Tampoco parecían poner demasiado interés en ello. Ola John entró por Kakuta para dar algo más de mordiente, pero Rulli seguía sin recibir noticias de sus rivales.
Y así se fue el partido, con la impresión de que el conjunto de Pepe Mel, que a última hora tiró desesperado de Joselu, podría estar jugando hasta mañana y que ni así lograría molestar a la Real. Ni el último empujón de orgullo le alcanzó a los coruñeses, que teniendo el empate milagrosamente a tiro, en los últimos minutos realizaron su único remate a puerta en el minuto 85, con un cabezazo manso de Borges que el meta rival detuvo sin problema.
FICHA TÉCNICA
Real Sociedad: Rulli; Zaldua, Iñigo Martínez, Navas, Yuri; Illarramendi, Zurutuza, Xabi Prieto; Vela (Canales, min.73), Oyarzabal (Granero, min.90), William Jose (Juanmi, min.65).
RC Deportivo: Lux; Juanfran, Albentosa, Sidnei, Luisinho; Bergantiños, Borges; Fayçal (Bruno Gama, min.80), Çolak (Joselu, min.70), Kakuta (Ola John, min.55); Andone .
Goles: 1-0: William Jose (min.27).
Árbitro: Ocón Arráiz. Amonestó con tarjeta amarilla a Albentosa, Fayçal, Bergantiños en el Dépor y a Navas en la Real Sociedad.
Incidencias: Partido disputado en el estadio de Anoeta, correspondiente a la 33ª jornada de LaLiga Santander.