Falta más de un mes para que el RC Deportivo dispute su primer partido como local en la campaña 2018/19, pero Tino Fernández admite que no sobra ni un minuto para avanzar en las obras en el estadio municipal de Riazor. Los blanquiazules se medirán al Sporting de Gijón, uno de los rivales más taquilleros de la Liga 123, en el segundo fin de semana de septiembre; y el presidente admite que el aforo del coliseo herculino «no estará al 100%» para esa cita. «Habrá que mover aficionados nuestros y también habrá problemas para dar entradas a la afición asturiana», confiesa.
Con el mercado veraniego de fichajes en plena ebullición, Tino Fernández no tiene más remedio que dejar un ojo puesto en la remodelación de Riazor. Tras la rueda de prensa en la que se anunció la renovación del acuerdo entre la entidad deportivista y Luckia, el mandatario mostró su inquietud sobre el progreso de los trabajos en el estadio. «Creo que va a estar listo, pero es cierto que es un motivo de trabajo importante en este tiempo. Es una obra compleja y ambiciosa en plazos», ha explicado el dirigente, que no cuenta con disponer del total de asientos acondicionados para la visita del Sporting en la cuarta jornada, estreno como local del conjunto que dirige Natxo González.
«Es un tema que tiene que estar y tendríamos que intentar que esté con el máximo aforo posible, porque se podría plantear con una grandísima taquilla. No va a ser posible porque no va a estar el aforo disponible al cien por cien. Tendremos que mover aficionados nuestros, a ver cómo los colocamos. También habrá problemas para dar entradas a la afición de Gijón«, ha confesado Fernández, destacando la complejidad de las obras. «Son un montón de cosas, tienen que estar un montón de cosas en los días previos. Hemos estirado todo lo que hemos podido, pero hay que apretar», ha añadido, insistiendo en su «buena relación» con el Concello de A Coruña y con Arias Infraestructuras, empresa encargada de los trabajos.
«Hay asientos rotos ahora, palcos que no se pueden utilizar, sala de prensa con problemas… queda mucho trabajo. Hemos conseguido tres jornadas sin partidos, pero el sorteo no lo controlamos, no es lo mismo que si hubiera sido un partido diferente. Es una recaudación importantísima. Hay una actitud fenomenal por todas las partes, pero hay que apretar e inconvenientes habrá, seguro», ha insistido Tino. «Los fondos no van a estar totalmente disponibles, aunque no es que se cierren. Tenemos que ver ese aforo que nos va a faltar, la seguridad, parte de las infraestructuras instaladas para hacer las obras…», ha detallado.
No es el aforo y la taquilla lo único que preocupa a Tino. También la retransmisión televisiva. «Estamos hablando de un partido muy importante que Movistar ha elegido como El Partidazo. Está el elemento de iluminación, que junto al terreno de juego es lo más importante para que el producto televisivo sea de calidad», ha señalado, «si me dejasen elegir lo pondría el domingo a las 12:00 porque hay luz natural, sería más fácil aunque tuviéramos que tener iluminación artificial». El presidente se declara «optimista, pero realista»; sabiendo que «no vamos a encontrar el estadio a full contra el Sporting».
«Creo que acabaremos superando los 21.000 abonados»
Por otra parte, Fernández se refirió al ritmo en la campaña de abonos para la temporada 2018/19. «Va más o menos como esperábamos. Siempre presumimos de un Deportivo con fidelidad alta por parte de sus aficionados, es uno de los activos principales del club», apuntó. La jornada del 1 de agosto se cerró con cerca de 17.000 abonados y Tino espera poder superar la barrera de los 21.000. «Hicimos un presupuesto que entendimos conservador, que no llegaba a 21.000; y creo que lo acabaremos superando. Confío en una buena temporada que tendrá efecto llamada«, declaró, destacando la importancia de este 2 de agosto, último día para renovar abono conservando asiento.