El ariete compareció ayer en rueda de prensa después del primer entrenamiento del Deportivo tras el parón navideño, y expresó su deseo de que en el 2015 los resultados del equipo mejoren.
José Verdú Nicolás ‘Toché‘ atendió a los medios de comunicación en lo que supuso la vuelta al trabajo del equipo tras varios días de vacaciones. El atacante manifestó que el parón le vino bien al equipo para «desconectar un poco» después de las goleadas recibidas en Málaga y ante el Villarreal. En ese sentido, el jugador cree que él y sus compañeros han «recargado las pilas«. «Ha sido una toma de contacto para empezar muy fuerte. Estamos con ganas de volver a entrenar y de que empiecen los partidos», señaló.
Uno de los temas centrales de la rueda de prensa fue la posible llegada de un nuevo delantero, algo que para el futbolista debe ser decidido por la secretaría técnica y el entrenador. «Si el equipo lo necesita se traerán medios, delanteros o lo que haga falta», explicó. Preguntado por si él o los demás arietes se sentían señalados o presionados, el murciano no echó balones fuera. «Yo pienso que el delantero es el que tiene que hacer goles«, al tiempo que reconoció que existieron partidos «en los que no hubo ocasiones claras» para que los hombres de ataque pudiesen ver portería. «Salimos más cabreados cuando no las tenemos que cuando las fallamos», admitió.
También se habló de la situación de Víctor Fernández, que el próximo sábado podría vivir sus últimos minutos como técnico deportivista si su conjunto no logra vencer al Athletic de Bilbao. «No hemos percibido en ningún momento que esté con el agua al cuello. Hemos entrenado cada semana igual y esta semana vamos a entrenar para ganar al Athletic», señaló. Precisamente, sobre la escuadra que dirige Ernesto Valverde, los definió como un equipo «muy aguerrido» y que cree que está «a nuestro nivel y que podemos ganarle», verbalizó.
También tuvo palabras para Lucas Pérez, un jugador «muy importante» y que cree que sería «el mejor fichaje» posible para el club herculino. En lo individual, admitió que estaba percibiendo por parte de la afición «mucho cariño dentro del campo y fuera«, y expuso su intención de devolverlo «con goles».