Gaizka Garitano cuenta los minutos que le restan para ponerse a los mandos de su nuevo equipo, pero lo hará con la necesidad de solucionar un caso muy particular: el de Luisinho Correia. El futbolista luso protagonizó un fin de temporada esperpéntico, siendo apartado del resto del grupo y dejando que su representante ofreciese una rueda de prensa para dar su versión de los hechos.
Y es que el lateral portugués fue uno de los protagonistas tras un enfrentamiento con Alejandro Arribas en un entrenamiento y también por mantener una relación poco cordial con Víctor Sánchez del Amo. El técnico llegó a decir que el jugador le había asegurado que le crearía problemas si lo apartaba del equipo. De hecho, fue uno de los motivos por los que el técnico madrileño se ha visto obligado a cambiar de aires después de la decisión de la directiva de rescindir su contrato.
Tino Fernández, presidente del Deportivo, aseguró en una rueda de prensa después del final de la temporada que Luisinho no estaría en la entidad herculina en la temporada 16-17. Pero lo cierto es que cuando resta un día para que empiecen los entrenamientos, todavía no se le ha encontrado acomodo a un jugador por el que parece no han llegado excesivas ofertas satisfactorias por el momento. En caso de una hipotética rescisión de contrato, se estaría marchando un jugador a coste cero y además habría que abonarle una indemnización por ello.
Cabe recordar que Luisinho tiene contrato en vigor hasta 2018 y la idea es conseguir algo de efectivo por su traspaso. Semanas atrás el Málaga se interesó por el futbolista, pero parece haberse quedado en nada. El lateral, por su parte, vería con buenos ojos seguir en la Liga española.