El feudo deportivista se volverá a vestir con sus mejores galas para el encuentro del sábado, en el que estarán presentes cerca de un millar de aficionados de la Real Sociedad.
El sábado se vivirá en el Estadio Municipal de Riazor el último encuentro de la temporada, el que sin duda es el más importante y vital del presente curso futbolístico para el Deportivo de La Coruña. Un partido al que no faltará el apoyo incondicional de una afición que animó a su equipo desde el primer momento, y para el que ya se ha colgado en las taquillas del estadio el cartel de ‘no hay billetes’.
El ritmo de venta de entradas fue tan grande que el pasado miércoles ya se habían agotado las localidades sub-25, las especiales de acompañante así como las de varias gradas. Las últimas 100 que estaban disponibles se agotaron a primera hora del día de ayer, lo cual sin duda es una muestra más de que la afición confía que el fútbol les pueda devolver el disgusto vivido hace dos temporadas. Otro de los datos relevantes es que más de mil aficionados donostiarras estarán animando a su equipo ‘in situ’ en el que también es un partido importante para su equipo.
Desde el club no son ajenos a que el equipo necesita que el ambiente sea especial, ya que tanto el consejo de administración como la plantilla blanquiazul han querido transmitir ese mensaje. “La afición sabe que tiene que poner los pulmones y el oxígeno que vamos a necesitar para derrotar a un gran equipo” declaró Fernando Vázquez, a lo que Juan Domínguez añadió que “la afición para nosotros es muy importante”. Pero sin duda quien mejor definió lo que se vivirá el sábado a las 21:00 en Riazor fue Augusto Cesar Lendoiro, quién dijo que “el ambiente será inenarrable”. Este apoyo incondicional es sin duda el primer paso para poder asistir a una fiesta con final feliz.
Buen ritmo de venta de los abonos para la temporada 2013/2014
Ayer también se abrió el plazo para la venta de carnets de socio para la próxima temporada, los cuales tienen unos precios especial como muestra de agradecimiento por la fidelidad de los aficionados deportivistas. A lo largo del martes se vendieron más de mil abonos, una cifra que se verá incrementada de forma considerable tras la jornada de hoy. Y es que desde primera hora de la mañana se acercaron cientos de personas para retirar su nuevo abono, las cuales aguantaron de forma estoica bajo la lluvia colas de más de una hora, una imagen que se repitió a lo largo de la tarde.