Los inicios nunca son fáciles, y a Devesa, que se hizo cargo de un equipo nuevo, no fue la excepción. Le costó bastante tiempo definir su once de gala, pero tras muchos ensayos, ha descubierto a dos laterales donde menos se lo podría esperar.
Con varias caras nuevas, el Deportivo ‘B’ tardó en engancharse a la pelea por el ascenso. En verano llegaron muchos refuerzos, entre ellos el propio José Luis Devesa, que se estrenaba en el banquillo del filial después de la marcha de Tito Ramallo. El entrenador tenía que conocer a su nueva plantilla, sobre todo a los recién llegados, y a lo largo de las semanas realizó diferentes pruebas hasta encontrar su alineación ideal. Una de sus dudas estaba en los laterales, donde ensayó con dos centrocampistas: Adrián Martínez y Diego Vela, que se acomodaron perfectamente a la posición.
Uno de esos fichajes veraniegos fue Iván González, que llegó procedente del Real Madrid para cubrir la baja de larga duración de Adrià Gallego, y se convirtió en la primera opción por la que se decantó el técnico para la banda derecha. Aguantó en la titularidad durante toda la primera vuelta, pero Devesa prefirió situar a Vela, que estaba acostumbrado a atacar y no a defender, en el lateral derecho. Al final, el capitán del Fabril, que buscaba su sitio en el once titular, ganó confianza y relegó a Iván a la suplencia. Precisamente, Álvaro Lemos y Vela han formado una pareja letal, que ha convertido la banda derecha en un verdadero quebradero de cabeza para las defensas de los rivales.
En el lateral izquierdo, Ángel Martínez, que está a la espera de saber si el club apuesta por él y lo renueva por tres temporadas más, dio más guerra. Durante 21 jornadas consecutivas no faltó a ningún partido, aunque una microrrotura fibrilar truncó su buena racha. Era el único futbolista que había en nómina para esa demarcación. Entonces llegó el momento de Adrián Martínez, un mediocentro que conocía esa posición, ya que había jugado ahí en su etapa de juveniles, precisamente con Devesa de entrenador, y con José Manuel Martínez ‘Secho’ antes de romperse el peroné. Tito Ramallo también lo había probado en la izquierda la campaña pasada.
Sin embargo, cuando Adrián ya se había afianzado en el lateral, se llevó un gran disgusto cuando le anunciaron que tenía una microrrotura en el recto del bíceps femoral, que le mantendría alejado de los terrenos de juego durante, al menos, cuatro semanas. La única esperanza que le quedaba es que todavía podía recuperarse a tiempo para estar disponible para la promoción de ascenso. Con esta lesión, Ángel cogió el testigo y ha vuelto a la titularidad.