Víctor Sánchez del Amo es un entrenador feliz por estar donde está y por hacer lo que hace. Entrenar en un club en el que estuvo siete temporadas como jugador. Además este curso, tras realizar la pretemporada completa con el Deportivo, está consiguiendo que las cosas en lo futbolístico vayan muy bien. Y eso repercute en lo social y lógicamente también en lo económico. El técnico del conjunto blanquiazul repasó en una completa entrevista en UEFA.com su trayectoria en los banquillos desde que recibió la llamada del equipo de Tino Fernández.
«La llamada del Deportivo era irrechazable por los siete años que pasé como jugador aquí, que fueron maravillosos», explica Víctor. «Se creó un vínculo emocional entre el club, entre la ciudad y mi persona que es muy difícil de romper, así que esa oportunidad que me daban fue una inmensa alegría independientemente de la situación que hubiera, y una motivación tremenda para sacar al equipo de donde estaba».
Antes jugador y ahora entrenador, el madrileño se enorgullece de volver a pasear por la banda del feudo herculino. «Estuve muchos años pegado a la raya del estadio de Riazor pero justo por dentro y ahora estoy pegado a la raya justo por fuera. Esperamos poder contribuir con nuestro trabajo a que el Deportivo pueda dar a la afición las alegrías del pasado».
Su primera misión fue reforzar el aspecto emocional, tal y como nos había explicado en la charla en profundidad que Riazor.org tuvo con él antes de final de año. «Nuestro primer foco de atención fue recuperar anímicamente la confianza porque sin eso es imposible desarrollar el trabajo táctico. Aunamos fuerzas y el equipo demostró una capacidad de lucha que hasta entonces no había logrado y pudimos salvarnos y empezar esta campaña con la perspectiva de hacer un equipo nuevo».
De ese equipo nuevo ha conseguido hacer un bloque a base de trabajo. «Hemos hecho 15 fichajes, hemos buscado jugadores polivalentes que nos permiten tener más riqueza táctica y diferentes sistemas, y hemos hecho hincapié en el aspecto físico. Empezamos bien y el equipo sigue creciendo. Queremos crecer, crecer y crecer y para eso hay que trabajar, trabajar, trabajar».
Desde el club, el objetivo marcado está claro. «No tenemos más objetivo que la permanencia y es lo que tenemos marcado desde el principio de temporada. Lo que pasa es que queremos lograrla cuanto antes. Para salvarse hay muchos puestos en la clasificación y vamos a intentar hacerlo en el puesto más alto posible«. ¿Un deseo para el 2016? «Poder seguir en la misma línea de trabajo en el ambiente de estabilidad que prima ahora en el club, que nos permita seguir dando pasitos para crecer, y que el club alcance la estabilidad económica, que ya se están dando pasos firmes para conseguirlo, y que vaya acompañada de la estabilidad deportiva que por suerte estamos logrando, y que nos permita crecer para dar más alegrías a nuestra afición».