Sergio Ramos fue uno de los protagonistas del partido del domingo entre Deportivo y Real Madrid. No fue por marcar gol o por alguna acción destacada, más bien por la expulsión que sufrió en Riazor y que hará que se pierda un partido por sanción.
Aunque el Real Madrid recurrió la segunda amarilla -una falta sobre Borja Valle-, Apelación ha decidido mantener la sanción a Sergio Ramos. Para el Comité no hay ningún error arbitral en la decisión del colegiado, que amonestó al central blanco por «disputar el balón a un adversario con el brazo en alto de manera temeraria».
Recordamos que Sergio Ramos propinó un manotazo en la cara a Fabian Schär. El propio defensa del Dépor explicó la jugada. «Creo que todos han visto lo que ha pasado. Me da un bofetón en la cara. Yo lo provoco un poco, pero esa acción para mí es expulsión. No me ha pedido perdón, pero no pasa nada, son cosas del juego».
De hecho, para muchos, Sergio Ramos debería haber sido expulsado por esa acción, pero no fue así. La segunda amarilla fue por un codazo a Borja Valle en el descuento. Algo que Pepe Mansilla ha ilustrado de la siguiente forma: