Albentosa fue uno de los protagonistas del encuentro entre Deportivo y Girona. El central convenció a Mel tras su partido en Eibar y se mantuvo en el once, teniendo incidencia en el partido cometiendo el penalti del 0-1. El jugador se mostraba molesto con los árbitros: «El penalti a Lucas es para justificar el mío, que no existe. Te jode. A mí y al equipo. Luego se dirá que si penalti de Albentosa y tal, pero ha sido muy injusto. He hablado con él y todo… fallos podemos tener todos, pero no sé por qué desde que estoy en el Dépor hay como cierta negatividad hacia nuestro club. Creo que ninguno de los dos es penalti y el fuera de juego que me pitan es muy dudoso».
El defensa no pone paños calientes a la situación del equipo: «La sensación es mala porque has peleado 90 minutos y no te llevas nada. Antes de empezar el partido les dije a mis compañeros que era un partido para intentar estar tranquilos o irse otra vez abajo. Como el partido del Leganés aquí el año pasado. No es el mismo resultado, pero hemos vuelto a fallar«.
Albentosa reconoció que les cuesta verse en esta espiral derrotista: «Al final es frustración, porque lo tienes ahí y parece que nunca lo llegas a coger. Lo intentas y no llegas. No sé por qué. El equipo tiene muchas armas. Pero queda mucho, nos tenemos que ocupar en sacar puntos en vez de preocuparnos. Tenemos que avanzar a pasos agigantados y no como ahora, con pasos pequeños».
Borges: «Eran puntos en casa que no podíamos dejar ir»
Borges también pasó por zona mixta para analizar la derrota, coincidiendo con Albentosa en el duro golpe anímico que supone para el equipo: «Estamos dolidos. Es un partido contra un rival que podíamos ganar. Cuando no lo haces es difícil, muy complicado. Reflexionaremos, pero eran puntos en casa que no podíamos dejar ir. Estamos molestos con nosotros mismos por no haberlo hecho bien».
Entre el ambiente pesimista, el tico rescató como positivo las ganas del equipo hasta el final: «Seguimos con ímpetu de seguir adelante. No tuvimos bajón ni nada durante el partido, fuimos a mejor pero al final no cayó. Seguimos intentándolo tras el segundo gol, seguimos de pie. Si continúas luchando a la larga te puede ayudar, pero es difícil empezar perdiendo y luego cuando empatas recibir el segundo«.
El mediocentro blanquiazul se mostró comprensivo con la afición blanquiazul después de que Riazor despidiera al equipo con una pitada: «La gente tiene toda la libertad de expresarse como quiera. Viene a ver a su equipo ganar y es entendible todo esto. Nosotros intentaremos hacerlo mejor la próxima vez y darle una alegría».