El técnico maño, que dirigió al Celta de Vigo durante cuatro campañas, se enfrentó al Deportivo hasta en diez encuentros oficiales. Ahora repetirá la experiencia, pero como entrenador de los coruñeses.
Uno de los muchos alicientes del primer derbi gallego de la temporada 2014-2015 estará en el banquillo. Y no es nada nuevo. Con los precedentes de Javier Irureta, Miguel Ángel Lotina y Fernando Vázquez en la hemeroteca, Víctor Fernández se convirtió este verano en el cuarto técnico en haber entrenado en algún momento de su trayectoria a Deportivo de La Coruña y Celta de Vigo. En el caso de Irureta, su llegada a la ciudad herculina fue inmediatamente posterior a su estancia en Vigo, y el hueco dejado por el irundarra en la ciudad olívica fue cubierto precisamente por un Víctor que mañana volverá a Balaídos para afrontar su undécimo clásico autonómico, pero representando en esta ocasión al conjunto visitante.
Lo cierto es que el periplo del entrenador aragonés en el Celta coincidió con uno de los momentos de máxima competitividad entre el equipo vigués y el Deportivo. Impulsados ambos por los jugosos contratos televisivos y aprovechando al máximo la implantación de la Ley Bosman, los dos máximos representantes del fútbol gallego tiraron de chequera e imaginación para reforzar año tras año dos plantillas que rebosaban talento pero que, a menudo, se sometían a una continua metamorfosis buscando subir un peldaño más.
La estancia de Víctor Fernández en Vigo dejó buenos momentos de fútbol y algunas exhibiciones de juego colectivo. Anfield dio fe de ello el 8 de diciembre de 1998, cuando los vigueses dejaron en la cuneta al Liverpool de Michael Owen y Gerard Houllier en un gran encuentro de Haim Revivo que dio el pase a los celestes a los cuartos de final de la Copa de la UEFA. También el Benfica de Jupp Heynckes, que se marchó de Balaídos casi un año más tarde con un 7-0 en la mochila. Sin embargo, la asignatura pendiente del ahora entrenador del Deportivo siempre fue vencer a su actual equipo. Diez partidos oficiales –ocho en Liga y dos de Copa del Rey- dejaron un balance de cinco victorias, tres empates y dos derrotas a favor de los coruñeses en cuatro años.
Cuatro de ellos tuvieron lugar precisamente en la primera temporada de Víctor Fernández al frente del Celta. El sorteo del calendario de Liga quiso que los eternos rivales se viesen las caras en la primera jornada, con los vigueses como anfitriones. El resultado: 0-0. El duelo volvió a repetirse a finales de enero del año 1999. De hecho, no en una ocasión, sino hasta tres veces en apenas tres semanas. El sorteo de la Copa del Rey determinó el enfrentamiento en octavos de final entre Deportivo y Celta. Curiosamente, el encuentro de ida en Balaídos fue el que dio paso a la leyenda del ‘Turu’ Flores como bestia negra del conjunto olívico. El oportunismo y tesón del ariete argentino derivaron en tres goles que, a la postre, decantaron el derbi liguero y la eliminatoria de Copa a favor de los blanquiazules, esta última tras una prórroga de infarto y un estupendo papel de Fran.
Víctor Fernández se tomó la revancha una temporada después, no sin antes sufrir una nueva derrota ante el Deportivo en Riazor, con un 1-0 para los hombres de Irureta a mediados de diciembre. ¿El autor del tanto? Quién si no. El ‘Turu’ Flores, que continuó su particular racha también en el segundo derbi galaico de aquel curso marcando en Balaídos el 30 de abril del año 2000, con los coruñeses jugándose la Liga. Aquel encuentro dejó imágenes de todo tipo, pero, por encima de todo, dejó expulsados: hasta un total de tres. Juanfran, Romero y Songo’o –este último cuando el Dépor ya había agotado los cambios- no terminaron el encuentro. Un gol de Gustavo López dio el 2-1 a los vigueses y el primer triunfo en un clásico al entrenador nacido en Zaragoza.
Al año siguiente, la historia volvió a repetirse, pero con protagonistas diferentes. Djalminha levantó Riazor con un gol de bandera en el derbi de la primera vuelta, que dejó un 1-0 para un Deportivo que debutaba aquel año en Champions League. Por su parte, el Celta equilibró el balance de derbis de la temporada venciendo en su feudo al eterno rival por 2-1 el 21 de abril del 2000. Djorovic y Mostovoi dieron el triunfo a los anfitriones, superando el tanto inicial de Valerón.
El primer triunfo oficial de Víctor Fernández en Riazor como entrenador del Celta estuvo cerca de producirse en su último año como técnico de los vigueses. Pese a que ya había logrado vencer al Deportivo en aquel mítico Teresa Herrera del verano de 1999, lo cierto es que el extécnico de Zaragoza y KAA Gent sólo ganó en el estadio deportivista en aquella ocasión. En el curso 2001-2002, un tanto de penalti de Walter Pandiani en el minuto 80 y otro en propia meta de Juanfran igualaron los dos goles de Berizzo –ahora técnico celeste- y Edú en el estadio herculino. Sin embargo, los blanquiazules mejoraron su imagen en la segunda vuelta, y superaron a los celtistas por un 0-2 que dejó para la galería el doblete de Diego Tristán y la famosa patada de Vágner al delantero algabeño. Fue el último derbi oficial de Víctor Fernández, que tras el amistoso estival en Pasarón retornará a Balaídos cuatro años después.