Con la llegada de Fernando Vázquez al banquillo del Deportivo se habló mucho de su papel como motivador. Se manifestó una y otra vez que el técnico de Castrofeito tenía la capacidad de exprimir al vestuario y de unirlo con la grada, pero Fernando es mucho más que eso. Y así lo demostró este jueves contra el Racing de Santander. El guion del partido fue mudando con el paso de los minutos, y él supo leerlo y supo realizar correcciones sobre la marcha.
Pitido inicial (5-4-1 en defensa, 5-2-3 en ataque)
De entrada, Fernando Vázquez optó por repetir el plan de partido de Soria: 5-4-1 en defensa, 5-2-3 en ataque. Para ello, alineó a Dani Giménez; Bóveda, Mujaid, Somma, Montero, Salva; Aketxe, Peru, Gaku, Koné; Sabin. Solo introdujo dos cambios de nombres: Koné y Sabin por Borja Valle y Mollejo. El Racing, que ya esperaba ese dibujo del Dépor, contaba con solo una referencia arriba: Jon Ander. A los 15 minutos, llegó el 0-1. Y en ese escenario a Fernando no le tembló el pulso, tiró de valentía.
Minuto 31, primer cambio de sistema (4-4-2)
A la media hora de partido, Fernando Vázquez sorprendió con la primera modificación, un cambio ofensivo. Retiró a Montero del campo y dio entrada a Emre Çolak, que debutaba. De ese modo, el Dépor pasó a jugar con defensa de 4: Dani Giménez; Bóveda, Mujaid, Somma, Salva; Çolak, Peru, Gaku, Aketxe; Sabin, Koné. Vázquez apostó por el 4-4-2, poniendo «jugadores de calidad por fuera«, actuando sin extremos. En el caso de Çolak, por su tendencia natural, el otomano aparecía por dentro, con mucha movilidad. E incluso llegó en alguna jugada puntual hasta el costado izquierdo, provocando cierto desorden en el equipo. En el minuto 32, después de dos acciones a balón parado, llegó el 1-1.
Descanso, y Çolak a la mediapunta (4-2-3-1)
Cuando tienes a un jugador en tu plantilla tan diferencial como Emre Çolak, hacer que se sienta cómodo para que saque su mejor versión es fundamental. Por eso, en el descanso, Fernando desplazó al futbolista turco a su posición natural: la mediapunta. El Dépor pasó a jugar 4-2-3-1: Dani Giménez; Bóveda, Mujaid, Somma, Salva; Peru, Gaku; Aketxe, Çolak, Koné; Sabin. Desde esa posición, Çolak fue la cara y la cruz. En el 53’ se sacó un golazo de la chistera -la jugada colectiva previa merece la pena ser visualizada una y otra vez, el Dépor sale tocando desde campo propio-. Y en el mismo minuto, en la celebración del gol, fue expulsado, dejando a su equipo con 10.
Minuto 53, 2-1 y expulsión
Con la expulsión de Çolak, el Dépor pasó a jugar con un 4-4-1: Dani Giménez; Bóveda, Mujaid, Somma, Salva; Aketxe, Peru, Gaku, Koné; Sabin. Y aguantó así 15 minutos, hasta que realizó el primer cambio defensivo: entró Álex Bergantiños por Koné. Esto desplazó a Gaku a la banda izquierda, donde completó una gran segunda mitad. Su trabajo defensivo fue notable.
Minuto 78, Vicente por Sabin, y Peru a la zaga (5-3-1)
En los últimos minutos, la carga de minutos empezó a pasarle factura a Sabin Merino, y Fernando Vázquez optó por retirarló para dar entrada a Vicente Gómez. El Racing estaba embotellando al Dépor con centros laterales y buscando el disparo desde la frontal, por eso, el técnico gallego decidió regresar a la defensa de 5. Para ello, aprovechó la polivalencia de Peru y retrasó su posición. Además, arriba, dejó descolgado a Aketxe. El centrocampista fue uno de los más destacados a lo largo de los 90 minutos. El Dépor acabó jugando con un 5-3-1: Dani Giménez; Bóveda, Mujaid, Peru, Somma, Salva; Vicente, Álex, Gaku; Aketxe.
Fernando movió las piezas dentro del mismo puzle
Más allá de los cambios de sistema, Fernando Vázquez utilizó a varios futbolistas en diferentes posiciones: Peru Nolaskoain actuó de mediocentro y de central, Gaku Shibasaki jugó en el doble pivote y en la banda izquierda, Emre Çolak en la banda derecha y en la mediapunta, Aketxe en las dos bandas y de referencia arriba, Koné en la banda izquierda y en la punta. Hasta cinco futbolistas modificaron su demarcación a lo largo del partido. Otro de los detalles curiosos que dejó el Deportivo-Racing.