El Dépor Abanca comienza este sábado la defensa del liderato (hoy, 12:00 horas en Abegondo) que Irene Ferreras no quiere que esta vez sea efímero: «Vamos con mucha ilusión e intentar esta vez mantener el liderato varias jornadas consecutivas. Lo hacemos además ante el equipo que nos hizo mostrar nuestra peor versión en la primera vuelta».
Precisamente esa goleada recibida ante el Cacereño hace que el partido sea más especial: «Hay algo, no lo voy a negar. Cuando tienes un partido como el de la ida… para nosotras fue positivo porque nos dolió mucho y uno saca aprendizaje. Después de estos meses, queremos volver a jugar contra ellas, volver a medirnos y quitarnos esa sensación de que el rival fue muy superior. Es la espinita clavada y el fútbol da revancha».
Ferreras apunta que ahí, en el factor mental y de madurez, es donde más mejoría ve: «En cuanto a juego hay una evolución, tenemos mucho más marcadas nuestras señas de identidad y cosas que queremos que nos definan. Pero me quedaría con el aspecto mental, la capacidad emocional que hemos estado mostrando para gestionar ciertos momentos de partido. En los últimos nos hemos visto en situaciones ajustadas, comprometidas… y hemos salido victoriosas. Especialmente en Granada. Estamos sabiendo ganar partidos que no tienen un resultado tan solvente, entendiendo lo que toca y sentirse cómodo en la incomodidad que te genera el partido».
La entrenadora blanquiazul reconoció haberse quitado un peso de encima con la victoria a domicilio: «No sé si será un punto de inflexión, pero probablemente allane el camino con esos fantasmas de ganar fuera. Cuando haces una cosa y la repites varias veces, tu cabeza te dice que eres capaz. Siempre cuesta generar el recorrido la primera vez, pero una vez el camino está marcado… para nosotras fue importante por cómo fue y las circunstancias de un partido que se puso cuesta arriba».