Muchas lecturas se puede sacar del Deportivo vs Tenerife de la Copa del Rey y prácticamente todas buenas. Obviamente también hay sombras y una de ellas, más si cabe en un día de celebración para la cantera blanquiazul, es la ausencia, un día más, de Martín Ochoa.
El delantero riojano fue uno de los jugadores del Fabril designados para completar la pretemporada con el primer equipo. Convenció a Idiakez para hacerse un hueco y su rol parecía destinado a agigantarse con la lesión de Barbero. El técnico probó otras soluciones antes de acudir al canterano, que acabó teniendo su primera gran oportunidad ante la Ponferradina.
Su buen partido en El Toralín en un contexto complicado hizo crecer la expectación y la sensación de que podía ser la gran esperanza para el puesto de 9 mientras el ariete andaluz estaba lesionado. Llegaron entonces cuatro titularidades consecutivas y su primer gol – valió tres puntos –. La última vez que salió de inicio fue en Irún, donde fue sustituido ya con el esperpéntico 3-0 en el marcador.
Presencia testimonial
Desde entonces, su presencia en el primer equipo se reduce a minutos testimoniales en tres de los últimos encuentros. 18 en total entre Logroñés, Tarazona y Osasuna B, algo que llama más la atención teniendo en cuenta que en dos de esos encuentros el equipo necesitaba marcar.
Lejos de mejorar, la situación reciente ha empeorado. Porque contra el Barça Atlètic tampoco tuvo minutos y frente al Tenerife Idiakez ni siquiera lo consideró como uno de los posibles cambios durante el tiempo reglamentario. Ochoa no salió ni a calentar antes del minuto 90 y sólo lo hizo durante un rato en la prórroga, antes de que el técnico tuviera que hacer la última sustitución por la lesión de Jaime.
De hecho, el riojano ha visto como en esa lista de preferencias por parte del entrenador del primer equipo, Kevin Sánchez ya lo ha adelantado.