Pablo Trigo se ha despedido como jugador de las categorías inferiores del Deportivo. El atacante recalará en el Cartagena de la División de Honor Juvenil, que apuesta por una de las joyas de la cantera herculina. Lo hace tras una temporada en la que marcó 14 goles en 28 partidos. Siendo también uno de los destacados en la Youth League.
Tras hacerse oficial su fichaje por el Cartagena, el propio Pablo Trigo ha querido despedirse a través de una carta en la que él mismo explica su cambio de aires. «Es el momento de cambiar de aires e irme a un club en el que han decidido valorarme y apostar por mí».
La despedida de Pablo Trigo del Deportivo
«Sigo pensando en cómo comenzar a escribir unas palabras que nunca pensé que tendría que hacer, están siendo momentos muy difíciles de llevar el tener que abandonar el club de mi vida, de mi ciudad y sobre todo ese único equipo el cual mi padre me enseñó sus valores y la grandeza que tiene desde que nací… y eso no cualquiera puede decirlo ni sentirlo.
Nunca imaginaría que después de este gran año tanto a nivel personal como a nivel colectivo podría llegar ese “adiós” que tanto miedo me daba al ver a compañeros míos hacerlo en su momento… pero en la vida nunca sabes lo que te puede pasar ni dónde vas a acabar.
Quiero desearle a todos y cada uno de mis compañeros que tuve en el club que sigan adelante, que puedan cumplir todos sus objetivos y que sean lo más felices que puedan estén donde estén, porque se lo merecen. Tampoco me puedo olvidar de algunas personas que para mí fueron especiales sobre todo en estos últimos años, los que estuvieron día a día mirando por mí, preocupándose, aguantándome (que no es fácil) y poniendo todo de su parte para que creciese en todos los aspectos. GRACIAS, porque son pequeños gestos que te refuerzan a diario y a al vez honra el buen trabajo, compromiso y dedicación que tienen con este club.
Tengo también que acordarme de muchos empleados del club que tuve a lo largo de todos estos años, entrenadores, médicos, fisios, readaptadores, utilleros, delegados, limpiadores… no podría irme de aquí sin ese reconocimiento hacia vosotros.
Por ultimo, las cosas a veces no son como queremos ni cómo nos gustaría, pero dadas las circunstancias, por mucho que me duela, es el momento de cambiar de aires e irme a un club en el que han decidido valorarme y apostar por mí.
Hoy, jodido, se va un deportivista de Abegondo, pero nunca lo hará de Riazor que desde pequeño fue uno más todos los domingos, desde detrás de la portería animando al equipo de su corazón, tanto en Primera, como en Segunda, como en la C… porque el amor a estos colores no entiende de categoría ni nunca lo hará.
Hasta pronto. Nos van a ver volver».