Ni cuando se colocó 1-0, ni cuando el Rayo Cantabria le empató, ni cuando su rival culminó la remontada. El Deportivo Fabril no tuvo su día y cayó derrotado (1-3) en el estreno de Abegondo en Segunda Federación. El conjunto de Óscar Gilsanz fue claramente superado por el también filial del Racing de Santander y empezó con el pie cambiado en casa, tras sacar un meritorio punto de Avilés hace una semana.
Sin Ochoa, sin Mella y sin Jairo, el Fabril acudía al choque con tres ausencias sensibles. Ambos estarán hoy en Riazor, con el primer equipo, para su beneficio personal. Pero sus bajas fueron una losa importante a la hora de restar diversidad y posibilidades para un Óscar Gilsanz que apostó por construir un doble pivote a priori sólido, con Brais Val y Barba, como eje del 4-2-3-1 en el que Castillo era extremo izquierdo y Kevin Sánchez punta.
Sin embargo, esa solidez que buscaba el técnico betanceiro estuvo lejos de ser una realidad. Porque el Rayo Cantabria encontró una y otra vez la forma de salir de la presión alta del Deportivo Fabril y generar superioridades a los dos medios blanquiazules, incapaces de abarcar tanto campo y tantos hombres.
Aunque el Rayo Cantabria siempre estuvo cómodo en el encuentro, al menos en los primeros minutos el Deportivo Fabril compitió de tú a tú y respondió a sus llegadas con llegadas. De hecho, bien pronto solicitó penalti el bloque coruñés por una entrada de Adrián Corral sobre Diego Gómez, que se inventó una ventaja con un control orientado que fue regate antes de ser derribado por su par, mientras ejercía de funambulista sobre línea de fondo.
No encontró la pena máxima ahí el Fabril, pero sí lo hizo poco después. Un eléctrico Mati Castillo se aprovechó de un resbalón del rival para recuperar el balón y asomar por el balcón del área. Ahí le salió Marco, al que el atacante fabrilista superó con un recorte que fue interceptado con una clara falta… en el límite entre fuera y dentro de la superficie de castigo. El colegiado entendió que, al menos, la infracción se había producido sobre la línea y señaló penalti para que Diego Gómez ajustase arriba, a la derecha del portero, para hacer inútil la buena estirada de Germán.
La cosa pintaba de lujo. Pero el tanto no terminó de darle ese control al Fabril. El cuadro herculino seguía buscando muy arriba a su rival y este le encontraba las fugas con las apariciones interiores de sus extremos, incapaces de controlar por los laterales y que desbordaban a un doble pivote que no daba abasto.
A pesar de ello, en una buena arrancada de Barba, el Fabril pudo ampliar su renta y cambiar el sino del partido. El centrocampista rompió y cazó un balón largo, se lo sirvió raso a Kevin y el ariete cedió para la llegada de Diego Gómez, que remató sin contundencia y molestado por un rival a las manos de Germán.
No golpeó el Dépor ahí y sí lo hizo el Rayo Cantabria después de dos avisos. Un doble rechace de un córner acabó dentro del área en los pies de un Marcos Bustillo que tuvo tiempo de controlar. A su paso le salió Somolinos, pero el centrocampista visitante le desbordó con un recorte que le permitió abrirse el hueco para encontrar el ángulo al palo largo y empatar.
El 1-1 era más que merecido y reforzó al Rayo Cantabria, que en otro arreón le dio la vuelta al partido antes del descanso. Adrián Campo recibió solo por dentro tras un gran cambio de orientación de su equipo que estiró al Fabril. El centrocampista detectó la posición del punta Santamaría y le filtró un gran pase que Puerto no acertó a interceptar. El ‘9’ controló, recortó a Somolinos y la puso en la base del palo para castigar al Deportivo con un golpe de realidad y establecer el 1-2 en el marcador.
Cambios sin efecto para el Deportivo Fabril
Óscar Gilsanz detectó que la cosa no iba y en el descanso decidió dejar en la caseta a Mario Nájera para dotar al equipo de la velocidad de Caroutas por fuera y darle libertad total a Diego Gómez en la mediapunta. Y más allá de que el peso del ourensán no decayó en el encuentro -más bien se echó al equipo a la espalda-, ni esa ni el resto de modificaciones funcionaron.
No ayudó que, al poco de comenzar el choque, Santamaría le ganase un duelo a Brais Val que dejó el balón muerto en el solar que era el centro del campo deportivista. La inocencia del Dépor la aprovechó, de nuevo, su rival. Por allí apareció la escoba de Diego Campo para recogerlo, galopar de cara contra la última línea local y, en el momento preciso, encontrar a Diego Fuentes para que sentenciase en el mano a mano ante Brais Suárez, que había entrado por un golpe en el pecho de Hugo Ríos.
Con el 1-3, el Deportivo Fabril se vino definitivamente abajo. Fue un ‘quiero y no puedo’ a pesar de las incorporaciones de Rubén, Vilán y Marc Lachevre, que tampoco pudieron cambiar la dinámica del encuentro. Porque el filial fue superado desde lo colectivo por por otro ‘igual’ con más experiencia en la categoría.
Ficha técnica
Deportivo Fabril: Hugo Ríos (Brais Suárez, min. 46); Santamaría, Puerto, Somolinos (Marc Lachevre, min. 81), Marotías; Brais Val, Barba (Rubén López, min. 59); Diego Gómez, Nájera (Tim Caroutas, min. 46), Mati Castillo; y Kevin Sánchez (Vilán, min. 59).
Rayo Cantabria: Germán; Mateo Gandarillas (Obeng, min. 82), Marco, Gomeza Adrián Corral; Diego Fuentes (Izan, min. 60), Diego Campo, Marcos Bustillo, Neco Celorio (Entreca, min. 70); Jorge Delgado y Álvaro Santamaría (Jeremy, min. 70)
Goles: 1-0 Diego Gómez, de penalti (min. 18); 1-1 Marcos Bustillo (min. 36). 1-2 Santamaría (min. 43). 1-3 Diego Fuentes (min. 55)
Árbitro: Alonso Luiña (Asturias). Amonestó con amarilla a Vilán y Diego Gómez, por el Deportivo Fabri, y a Marco y a Marcos Bustillo, por el Rayo Cantabria.
Incidencias: Segunda jornada del Grupo 1 de Segunda Federación. Cidade Deportiva de Abegondo.