El técnico maño, que espera que lo del Pizjuán haya sido “un hecho aislado”, es optimista de cara al futuro, ya que “el objetivo no se consigue en la primera semana de octubre”. Además, avisó de que “no hay que instalarse en el miedo” y aseguró que nunca ha pensado en dimitir.
Se esperaba y no decepcionó. Esta mañana tuvo lugar en Abegondo la rueda de prensa de Víctor Fernández posterior a una semana llena de declaraciones de los jugadores y del presidente en las que se cargó contra la actitud del Deportivo en Sevilla. El técnico herculino había defendido el compromiso de los suyos nada más caer por 4-1 en el Ramón Sánchez Pizjuán, pero hoy, más contundente de lo habitual, rectificó sus palabras y explicó que en ese momento su deseo fue el de proteger a la plantilla.
“Se han dicho todos los adjetivos posibles del partido de Sevilla, todos muchos más duros de los que pude decir yo después del mismo, donde lo que quería era defender a mis jugadores. Fue solo un partido. Un partido del que no se puede rescatar nada porque fue el peor en todo. Estuvimos absolutamente vacíos en actitud, coraje, fútbol y organización. Solo espero que sea un hecho aislado y que nos sirva de estímulo para el futuro”, expuso en el inicio de su comparecencia ante los medios informativos.
El preparador aragonés, que tuvo ayer una reunión “positiva” con Tino Fernández para “dar a conocer de primera mano el análisis de la trayectoria del equipo” hasta el momento, aseguró que en A Coruña hay “instalado un miedo normal por venir de varios descensos”. Bajo su punto de vista, esta situación “atenaza y debilita”, e incluso puede llegar a “dividir”, por lo que hay que tener “calma y estar tranquilos”, ya que “ningún equipo logra el objetivo en la primera semana de octubre”. Ahora, la meta del cuerpo técnico y de la plantilla es “resetear” para “mejorar y ser más regulares” durante los encuentros.
Preguntado por si ha pensado en algún momento en dejar su cargo como entrenador del Deportivo, el maño lo negó rotundamente y dejó claro que él siempre tiene “una mentalidad positiva”. “Este proyecto del Dépor es más que una cuestión personal por razones que no quiero explicar. Por eso estoy con mucha ilusión, mucha fuerza y, sobre todo, muy tranquilo. Tú no haces tu trabajo pensando en que te van a echar y yo tampoco lo pienso. Ahí está el error; hace una jornada estábamos salvados y no podemos dramatizar. Hoy no, pero siguen quedando más de 30 partidos y estamos a un solo punto de salir. ¡No hay que instalarse en el miedo!”, reiteró.
Otro de los temas de los que se pidió opinión a Víctor fue el mensaje de un periodista en la red social Twitter tras la derrota en Sevilla, en el que se le acusó de afirmar que la plantilla herculina es la peor que ha tenido en su carrera. «Ya sé quién es el que lo dijo. No lo conozco, no he hablado con él en mi vida y es una información que no he dicho. Si hubiera habido una buena intención lo normal hubiera sido que llamarme por teléfono y preguntar. Hay que estar preparado para ello porque en este tipo de situaciones a mucha gente le gusta dividir. Me produce una sensación de rechazo, es vomitivo», expresó.
Dio a entender que ante el Valencia habrá cambios
Respecto al apartado puramente deportivo, el míster blanquiazul no quiso dar pistas del once que alineará la próxima semana ante el Valencia, pero mandó un aviso a navegantes al declarar que “en estos momentos no hay ningún jugador titularísimo” y dejó entrever que hará cambios. Además, está pendiente de los cinco ‘tocados’ -Lux, Juan Domínguez, Lucas, Cuenca y Postiga-, de los cuales confía en recuperar “a cuatro” porque “Juan es difícil que llegue”. Por otro lado, se mostró prudente con la situación de Pablo Insua, recientemente recuperado y ahora concentrado con la Selección Española sub21: “Habrá que ver cómo viene porque no sabemos cómo va a trabajar allí, cosa que para nosotros es una putada”.
El técnico deportivista tampoco quiso hablar demasiado sobre una posible modificación de estilo frente al equipo de Nuno, y defendió que su planteamiento no es excesivamente ofensivo, al contrario de lo que se le ha acusado en varias ocasiones. “En la mayoría de goles que hemos encajado hemos estado diez jugadores detrás de la pelota, así que no es porque juguemos a 50 metros de la portería. Muchas veces no consiste en estar en el sitio, sino actuar en el sitio”, manifestó, y reconoció fallos “en la defensa en zona”, aunque no se plantea cambiarla.
Por último, Víctor Fernández lamentó que los suyos hayan perdido “valores” que sí tuvieron al inicio de temporada. “No puede ser que un equipo haga 23 o 24 faltas en un partido y que nos tachen de violentos, cosa que no somos porque somos unas madres, y que contra el Sevilla o contra el Madrid, dos de los mejores de Europa, haga solo ocho o nueve”, explicó.