Se cumplen veinte años de una de las grandes gestas del Deportivo. Dos décadas desde que los blanquiazules pusieron patas arriba el Santiago Bernabéu, cuando el Real Madrid lo tenía todo preparado para celebrar su centenario por todo lo alto.
La plantilla del Deportivo llegó a Madrid como un mero invitado a la fiesta. Nadie pensaba que aquel equipo entrenado por Javier Irureta iba a ser capaz de silenciar a toda la capital. Y es que los blanquiazules salieron como un torbellino y a los seis minutos Sergio ya estaba celebrando el primero de los coruñeses.
Diego Tristán se sumó a la fiesta sobre el verde del Bernabéu. Antes del descanso vacunó a un equipo que en su día lo descartó. El Deportivo no quería ser un nombre más en la interminable lista de invitados del Real Madrid, quería protagonizar su propia celebración aunque conscientes de que iba a tener que sufrir para conseguirlo.
Raúl recortó distancias pero el Deportivo supo aguantar y llevarse el trofeo a Coruña. Una victoria que hizo todavía más grande a un equipo que marcó una época. Con jugadores de renombre como Molina, Manuel Pablo, Naybet, Sergio, Valerón, Djalminha, Pandiani, Scaloni, Tristán o Mauro Silva.
«Tengo el gran recuerdo de cuando voy a recibir la Copa, veías una parte del estadio con miles de deportivistas y la otra completamente vacía. Había una afición eufórica y otra muy decepcionada», recordó Fran hace unos días.
«De aquellas teníamos un equipazo, capaz de hacer grandes gestas. A pesar de que daban al Madrid como gran favorito, que tenían todo preparado, fuimos capaces de hacer un gran partido, de los mejores que yo recuerdo como profesional. Nos salió todo perfecto”.
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