La afición del Deportivo acudió en masa para animar al equipo tanto antes como después del encuentro. La hinchada se dio cita en los aledaños de Riazor para dos horas antes recibir al bus y darle todo su apoyo a los de Borja Jiménez.
Riazor volvió a vivir una de las noches grandes con una afluencia masiva de público y un ambiente espectacular. Desde por la mañana se vieron camisetas blanquiazules por A Coruña y por la tarde todo se tiñó de blanquiazul.
Así fue como primero hubo recibimiento al equipo y después Riazor atronó como nunca para llevar en volandas a los suyos. Más de 26.000 personas acudieron a ver la semifinal ante el Linares y ahora se volverán a dar cita dentro de una semana para el encuentro definitivo. Los herculinos están a un partido de volver a Segunda División.
Si has estado en Riazor, búscate en la galería de nuestra fotógrafa Mónica Arcay.