El centrocampista ve lógico que la gente esté molesta con el equipo y volvió a explicar unas declaraciones que hizo a nivel nacional y que le han acarreado numerosas críticas e insultos.
Tras un entrenamiento en el que los aficionados herculinos reprocharon a los jugadores la falta de actitud en los últimos partidos, Álex Bergantiños asumió su rol de capitán y salió a rueda de prensa para dar su versión de los hechos.
«Creo que no ganamos los partidos que deberíamos haber ganado. La competición nos dio una vida extra y ahora que el sábado sea la definitiva. Si salimos con buena mentalidad y somos capaces de hacer un buen partido para enganchar a esta gente, todo se vería diferente», explicó el centrocampista en la sala de prensa en Abegondo.
En cuanto a lo sucedido en Abegondo, reconoció la preocupación y explicó cómo lo vivió él desde el campo de entrenamiento. «Hay gente que intenta escuchar y otra que ni lo intenta. Conmigo no fue capaz de hablar nadie. Solo eran reproches y nada más. Entiendo que la gente está cabreada. La imagen de ayer no fue digna de profesionales ni de futbolistas del Deportivo. Estamos dolidos y la gente también está molesta, pero las formas nunca se pueden perder».
De hecho, el coruñés reveló que lleva meses sufriendo insultos y hasta amenazas. «Me llevan increpando desde hace hace tiempo, todo el año. No sé lo que se entendió de ese día. Salí aquí a hablar a nivel nacional a condenar la violencia, sin más, pero hay gente que no lo entendió así y que interpretó diferente. Ese día condené la violencia, que son cosas que tienen que investigar la policía. Nosotros al final tenemos que dar explicaciones que no nos corresponden. Es una consecuencia de mi trabajo, de mi situación en el club y en la ciudad», expresó.
El futbolista tiene claro que la plantilla es la única responsable de reenganchar a una afición harta de los malos resultados y de la mala imagen. «Dependerá de nosotros. Está claro que la gente está molesta con la temporada, con la situación que se ha vivido todo el año y tenemos que ganarnos a la gente en el campo, no podemos pedir más. Engancharlos para que crean y nos hagan creer a nosotros también».
Sobre el partido del Elche, reconoció el malestar dentro del grupo por la falta de actitud. «Ninguno está satisfecho con su rendimiento de ayer. Tenemos que dar mucho más todos, individualmente y valorar si cada uno ha dado todo lo que tiene, y cambiarlo. No podemos arreglar lo que pasó ayer y hay que agarrarse a la última oportunidad».
De hecho, hoy Víctor Sánchez del Amo trabajó para revisar las acciones fallidas ante el conjunto ilicitano. «Incluso vimos también vídeo comparando acciones del partido con otros. Nadie está satisfecho con lo que pasó ayer con su rendimiento. Todos entonamos el mea culpa a nivel individual, principalmente. Si todos damos más y somos más intensos en las disputas, no nos puede ganar como ayer un equipo de nuestro nivel».
Por último, reveló que en el vestuario la unión sigue siendo la máxima. «Está claro que ha habido discusiones y cabreos entre nosotros porque si no es que no nos importaría. Lleva habiéndola varios partidos porque estamos en una situación límite. Lógicamente, la relación entre nosotros es buena, pero tenemos que sacar el carácter para empujarnos entre todos y sacar esto adelante«, finalizó.