El central canario repetirá titularidad junto al argentino Diego Colotto y avisa que los problemas defensivos del equipo no dependen solo de ellos.
El buen arranque de temporada del Deportivo no ha provocado que en el entorno blanquiazul se haya colocado una venda en los ojos para obviar los problemas que tiene el equipo. El más importante de ellos es la fragilidad defensiva, que de no ser por las magníficas intervenciones de Aranzubia habría causado la pérdida de varios puntos más. Tanto ante el Recre como frente al Sabadell, el meta riojano salvó dos puntos con dos intervenciones prodigiosas en cada partido. Pese a ello, el canario Aythami no cree que sea un problema de la linea de atrás.
«Hay que mejorar los desajustes defensivos, aquí defendemos todos pero no estoy quitándonos culpa a los defensas». Para el ex de la UD Las Palmas y el Xerez, la clave de que el rival juegue con tantos espacios radica en que «cuando vamos a presionar tan arriba es normal que haya algún desajuste».
Además, tras tres victorias en cuatro partidos, a los que hay que añadir el triunfo en Copa, Aythami resta importancia al tema y aboga por seguir compitiendo de la misma manera. «Estamos en un momento positivo, muchos se cambiarían por nosotros. Tenemos que seguir a lo nuestro, algún partido perderemos pero hay que estar preparados. Si no ganamos, tenemos que seguir porque todavía queda mucha Liga», explicó.
El rival será un Alcorcón, un equipo que la temporada pasada hizo de su estadio un auténtico fortín al sumar 45 puntos en Santo Domingo. Las reducidas dimensiones del terreno de juego serán una buena prueba para un Deportivo que tendrá que acostumbrarse cuanto antes a campos como el madrileño. «En campos como el de Alcorcón se gana el ascenso. Se gana cada domingo, pero seguramente el partido de mañana será el partido más complicado hasta ahora», indicó el canario. La única forma de lograr algo positivo pasa por «correr mucho y sudar mucho, estar muy metidos, si no allí no sumamos ni locos».
El Deportivo no estará solo en Alcorcón, ya que se espera que como ante el Barcelona B en el Mini Estadi, las gradas estén pobladas de color blanquiazul. De los 4.500 espectadores con los que cuenta el campo de capacidad, alrededor de un millar podrían animar al equipo visitante, algo que hará que los futbolistas de Oltra se encuentren «como en casa», apuntó Aythami para finalizar.