El Deportivo pondrá rumbo a Andalucía este fin de semana para enfrentarse a un Córdoba que no está viviendo ni mucho menos su mejor momento del año. Los cordobeses empezaron la temporada ofreciendo unas muy buenas sensaciones, colocándose rápidamente en el liderato de una categoría a la que ascendieron el pasado verano. Sin embargo, el buen hacer de la primera vuelta del campeonato ha dejado su lugar a un rendimiento que no satisface a la afición blanquiverde.
Precisamente fue en la jornada 19, la última del primer tramo de campeonato, cuando perdieron el liderato en favor del Alcorcón. Tras una mala racha de 3 derrotas en cuatro partidos, los andaluces vivieron su primera crisis del curso y se vieron relegados a la segunda posición. A partir de ahí, al equipo le ha costado mucho ganar partidos, lo que ha supuesto la destitución de su entrenador Germán Crespo y la llegada a su banquillo de un viejo conocido de la afición coruñesa como Manuel Mosquera.
Una importante pérdida de puntos
La segunda vuelta del Córdoba ha traído consigo una una menor renta de puntos para el rival de este domingo del Deportivo. Hasta la jornada 19, su media por partido era de 2,05 puntos, lo que explicaba su buena situación en la tabla. Entre ese momento y la última jornada, los cordobeses han visto cómo su media de puntos en cada encuentro descendía hasta los 0,69. Hay que tener en cuenta, eso sí, que aun está pendiente de disputa el Córdoba-Racing de Ferrol, suspendido en su día por el desvanecimiento durante el tiempo de juego del central Dragisa Gudelj.
El bagaje del equipo hasta ahora en la segunda vuelta es de un solo partido ganado, seis empates y seis derrotas. Unos números muy poco halagüeños para los intereses cordobesistas, pero que no deben relejar ni mucho menos a los jugadores y cuerpo técnico del conjunto deportivista. El Córdoba se encuentra inmerso en la lucha por entrar en el playoff y en casa tratarán de mejorar su rendimiento con el cambio de entrenador.
Problemas en ambas áreas
En lo que a goles se refiere, también se aprecia un importante cambio con respecto al equipo que llegó a ser líder. Durante los últimos trece partidos acumulan únicamente siete goles a favor, por los catorce en contra que han encajado. Nuevamente, la comparación habla de un destacado bajón de rendimiento pues, de los 1,84 tantos por encuentro de la primera vuelta se ha pasado a apenas 0,53.
A nivel defensivo, el empeoramiento también existe. Han encajado prácticamente lo mismo en lo que va de segunda parte de la temporada, 14 goles (1,07 por partido), que en toda la primera, donde fueron 17 (0,89 por partido). Varias asignaturas donde deberá meter mano el nuevo técnico, Manuel Mosquera, si quiere ver a su Córdoba disputando el próximo playoff de ascenso. El próximo examen, ante el Deportivo en el Nuevo Arcángel.