Jandro Castro se ha comido los turrones en el banquillo del Cartagena… y poco más. El conjunto de la Región de Murcia ha decidido prescindir de los servicios del entrenador asturiano después de no haber sido capaz de ganar en A Malata ante el Racing de Ferrol. El equipo suma dos empates consecutivos aunque la reacción se ha quedado corta y esos puntos no son suficientes para acercarse de forma definitiva a la zona de salvación.
Después la marcha del Pitu Abelardo, ha dispuesto de dieciséis jornadas para darle un lavado de cara al equipo, aunque visto lo visto sobre el verde y en la clasificación, no ha sido posible. En total, sus cifras como técnico blanquinegro son de tres victorias y tres empates, a los que hay que unir diez derrotas que han pesado demasiado. Unos números difíciles de sostener y que han llevado a la directiva a optar por un nuevo cambio.
«El FC Cartagena informa que en el día de hoy se le ha comunicado a Jandro Castro que deja de ser entrenador del primer equipo albinegro. Desde el Club, agradecemos la profesionalidad y el trabajo del entrenador y su cuerpo técnico en este tiempo y le deseamos la mejor de las suertes en su futuro tanto profesional como personal», reza el comunicado publicado en la página web del ‘Efesé’.
Una manita del Deportivo
El Cartagena siempre será un rival especial para Óscar Gilsanz, pues fue este el club al que se enfrentó en su primer partido al frente del Deportivo. Todavía como interino, el de Betanzos consiguió una goleada por 1-5 en Cartagonova para sacar al conjunto blanquiazul de un momento un tanto deprimente con la destitución de Idiakez aún en la memoria del deportivismo.
Ese partido fue una piedra más contra la casa del Cartagena, que ve cómo el equipo se hunde en el fondo de la clasificación sin muestras de reacción alguna por el momento.