Dos convocatorias después, Yeremay Hernández ha perdido el turno en la selección española sub-21. En la mañana de este viernes, Santi Denia ofrecía la última lista antes del Europeo de junio. Y en la citación no se encontraba el extremo canario.
El ’10’ blanquiazul se pierde, de este modo, los dos encuentros de preparación ante República Checa y Alemania y, si quiere convencer a Santi Denia para que le reserve una plaza en la lista del torneo continental, deberá hacerlo única y exclusivamente a través de sus actuaciones en el Deportivo. Un Dépor que, a cambio, podrá contar con el canario con total seguridad este lunes ante el Castellón y el próximo domingo 23 de marzo frente al Cartagena.
Ante este escenario, Sergio Piñeiro y Xurxo Gómez debaten sobre cuánto de positivo es para el Deportivo que Yeremay Hernández no vaya con la sub-21: ¿Es positivo para el club blanquiazul o no?
Sergio Piñeiro: Sí, es beneficioso
El hecho de que Yeremay Hernández no acuda a esta convocatoria de la sub-21 supone una buena noticia a corto plazo para el Deportivo, pero también a una media distancia. El extremo canario es uno de los mejores jugadores del club y necesita recuperar su mejor versión para ayudar en la lucha por la permanencia. Por tanto, ¿en qué mejor sitio que en casa rodeado de su entorno para volver a ver su mejor nivel?
Seguro que para el futbolista es un ‘extra’ de motivación jugar con la camiseta de la selección española, pero no hay que olvidar el riesgo que suponen siempre estas ventanas FIFA. A cambio no hay un partido de eliminatoria de clasificación para el Europeo ni nada que se le parezca. Únicamente dos amistosos en los que Yeremay podría sumar un puñado de minutos a costa de exponerse a una lesión que le obligase a parar en un tramo importante de la temporada.
Estos partidos podrían verse como una oportunidad de despuntar y aumentar su valor al añadir a su currículum más experiencia como internacional. Sin embargo, ya vimos cómo le afectó al ’10’ del Deportivo todo el ‘run run’ durante el mercado de invierno. Una situación que no es nada fácil tratándose de un futbolistas joven al que se suma la presión de ser la estrella en una plantilla que perdió a Lucas Pérez como su principal referente.
Si bien esto puede suponer una pequeña decepción por haber perdido su hueco en la convocatoria, un buen asesoramiento puede hacerle ver la situación como una oportunidad para reivindicarse de nuevo en el tramo final de la Liga. Conseguir un buen rendimiento en estos últimos meses podría hacer que Santi Denia se replantease su decisión y finalmente acabar incluyéndole en la convocatoria para el Europeo de Eslovaquia.
Xurxo Gómez: No, no es beneficioso
Poder contar con Yeremay Hernández siempre es positivo. Eso es una evidencia. Un dato irrebatible. El canario no solo es el máximo goleador del Dépor este curso, sino un futbolista con enorme incidencia en el juego ofensivo del equipo.
Sin embargo, entender que para el Deportivo es positivo contar con Yeremay Hernández en un partido (habría que ver si la RFEF le hubiese exigido concentrarse ya este lunes a costa de perderse también el duelo de Castellón) a costa de que el futbolista no haya sido elegido por el seleccionar es elegir pan para hoy y hambre para mañana. Porque considerar «bueno» que un futbolista joven y con proyección no haya sido llamado por su selección nacional no solo es acercarse al debate desde un punto de vista egoísta, sino que también supone hacerlo con una escasa amplitud de miras.
Por un lado, desde el prisma de pensar en la entidad, conviene tener en cuenta que un futbolista con trayectoria internacional eleva de manera automática su caché. Puede que Yeremay salga este verano o puede que no. Pero lo que es seguro es que, si lo hace, el Deportivo tendrá una posición de mayor fortaleza a la hora de pedir una cantidad más alta cuanto más rendimiento haya demostrado el chico no solo en el contexto de su club, sino también en competiciones de selecciones.
A esta circunstancia se le une el hecho de demostrar que, si uno rinde bien, la categoría es secundaria a la hora de ponerse en el escaparate al que miran los seleccionadores. Que se puede ir a la selección estando en Segunda División. Que no hay que tener prisa por querer dar el salto lejos del Deportivo porque en el Deportivo puedo ir a la selección. Es, evidentemente, una realidad básica desde la que retener a tus talentos como Yere, Mella u otros que vendrán y, a la vez, atraer con más garantías a otros jóvenes para que terminen de formarse en A Coruña.
Pero, por otro lado, está el factor humano. Porque no hay que olvidar que estamos hablando de personas. Y en este debate apenas parece tener importancia lo que piensa de todo esto Yeremay Hernández cuando es lo más (y casi lo único) importante. Por mucho que en los últimos meses la selección haya sido uno de los factores para distraer la cabeza de Yere, el de canario tenía ganas de volver. Quedarse fuera de la lista una vez había conseguido alcanzar por primera vez una selección nacional puede ser un golpe difícil de digerir.
Quizá ejerza como factor desde el que rebelarse y aumentar el rendimiento, sí. Pero también existe el riesgo de que genere una frustración en Yeremay. Al fin y al cabo es una decepción. Y un futbolista frustrado e infeliz es peor futbolista. Por eso las noticias como que una selección nacional se fije en un jugador propio solo pueden ser siempre positivas, más allá de las adversidades a corto plazo y del necesario debate sobre la conveniencia de paralizar o no la Liga Hypermotion durante una fecha FIFA.