Se acabó el Deportivo. No de forma matemática, porque todavía quedan muchos puntos en juego y posibilidades para el ascenso. Pero si el equipo acaba logrando el objetivo será tras renacer de sus cenizas (0-2), que desde hoy yacen en un estadio de Riazor que presenció en directo el golpe de gracia al proyecto coruñés. El Rayo Majadahonda fue superior en todo momento, controlando el encuentro y hurgando lo justo en la herida sólo por su escaso acierto arriba, suficiente, de todas formas, para sonrojar a un gigante venido a menos.
- Sin sangre. Era el día, el Dépor recuperaba a sus jugones y debía dar un golpe sobre la mesa desde el primer minuto. Hasta la meteorología concedió una tregua y prestó el sol para que todo estuviese la parte blanquiazul. Pero los futbolistas estaban de no. La desidia mostrada en la primera mitad no es la propia de un equipo que vende finales en este sprint final. Ni Expósito, ni Carlos, ni Nahuel en la mediapunta. Ninguno dio un paso al frente.
- A verlas venir. Los de Natxo debieron irse al vestuario con la sensación de haber recibido un meneo considerable. Lo único que separó al Rayo Majadahonda de marchar con ventaja al descanso fue la falta de acierto en los últimos metros. Con sus tres puntas, siempre descolgados, castigaron una y otra vez a una desorientada defensa local. Iriondo planteó el encuentro para defender sólo con siete jugadores. Le sobró alguno ante la inoperancia deportivista, que no tiró a puerta en los primeros 45 minutos.
- De cántaros y fuentes. Natxo introdujo a Vítor Silva y cambió a un 4-3-3 con Nahuel y Quique para controlar mejor el partido y las contras del Rayo. De nada sirvió. Porque al primer balón perdido Aitor Ruibal le ganó la espalda a Domingos por enésima vez. Con tiempo y espacio, esta vez tuvo la templanza necesaria para frenar dentro del área, colocarse el balón a su pierna buena y enroscarla lejos del alcance de Dani Giménez.
- Sin respuesta. A Riazor no le queda ni siquiera la épica de ver a su equipo empujar. Porque no hubo reacción, ni el más mínimo atisbo de orgullo ni recursos para siquiera encerrar a un rival que jugó siempre como si fuera el equipo grande. Aitor puso el segundo en otra contra cuando todavía faltaban 20 minutos. Un rato de agonía donde la afición terminó de perder la paciencia con los suyos.
FICHA TÉCNICA
RC Deportivo: Dani Giménez; Bóveda (Pedro, min.70), Domingos, Marí, Caballo; Expósito (Valle, min.75), Didier Moreno, Nahuel, Vicente (Silva, min.46); Quique, Carlos.Rayo Majadahonda: Basilio; Iza, Luso, Morillas, Benito; Fede Varela, Óscar (Guerrero, min.80), Enzo (Galán, min.70); Aitor, Héctor, Manu (Carlitos, min.46).
Goles: 0-1, min.52: Aitor. 0-2, min.70: Aitor
Árbitro: Gorostegui Ferández, colegio vasco. Amonestó a Vicente, Carlos, Moreno y Vítor Silva en el Dépor y a Benito en el Rayo Majadahonda.
Incidencias: Estadio de Riazor, 15.800 espectadores. Partido correspondiente a la jornada 33 de Segunda División.