Una temporada más, el Deportivo volvió a asombrar al fútbol español por la entrega de una afición que, tras cuatro años en el barro, dio una nueva exhibición de fidelidad y amor a sus colores. Especialmente espectaculares fueron las imágenes del día del ascenso ante el Barça Atlètic, con un recibimiento y fiesta posterior que puede haber supuesto la primera piedra para una nueva iniciativa por parte del club: Un proyecto de Fan Zone permanente para todos los partidos en Riazor.
Esa es la nueva idea que ronda la cabeza de los dirigentes de la Plaza de Pontevedra, que quieren replicar cada 15 días lo vivido el pasado 12 de mayo en la explanada del Palacio de los Deportes, donde a lo largo del día se llegaron a juntar 80.000 personas. No hay nada definitivo todavía, pero el Deportivo estudiará esta posibilidad ante la gran cantidad de seguidores que en cada encuentro como local se dan cita en las inmediaciones del estadio.
Y es que la masa social deportivista no ha parado de romper récords esta temporada y todo hace indicar que el regreso al fútbol profesional no hará más que impulsar esa locura. Este curso Riazor fijó la asistencia más alta para un partido de liga regular en Primera Federación con 28.112 contra el Lugo, que posteriormente se encargó de romper ante la Cultural (29.079) y al Barça Atlètic (31.833). En esta lista también figura el mejor registro para un partido del Dépor Abanca, con los 14.057 espectadores que acudieron a la llamada del equipo femenino para presenciar en vivo el ascenso a Liga F.
La asistencia media quedó fijada en 23.020 aficionados, la tercera mejor de la historia del club y a falta de que se ponga en marcha la campaña de abonados, la lista de espera supera las 11.000 personas.