Cada entrenador tienes sus virtudes. Y en el caso de Pepe Mel es indudable que una de ellas son sus arreones iniciales cuando llega a un banquillo nuevo. Podrá gustar más o menos su estilo, y podrá extenderse más o menos en el tiempo, pero algo es evidente: cuando aterriza en un club, lo hace con buen pie. Y este domingo (20h) aterriza en uno, debuta con la UD Las Palmas en Riazor. Repasamos sus precedentes.
Casualidad o no, a Pepe Mel le sonrieron los buenos resultados cuando se hizo cargo del Betis -hasta en dos etapas- y se repitieron en el Deportivo. Mientras que en A Coruña no perdió hasta la cuarta jornada, en Sevilla no lo hizo hasta la séptima -en la primera etapa- y la duodécima -en la segunda-. Pero vamos por partes.
Doble inicio dorado con el Betis
Pepe Mel dirigió al Betis en dos épocas diferentes. La primera de ellas, entre 2010 y 2013. Incorporado por aquel entonces en pleno mercado de verano, el exentrenador deportivista firmó con el equipo verdiblanco con el objetivo de devolverlo a la máxima categoría. Y lo consiguió. Para ello, una de las claves fue el buen inicio. En la jornada 7 del campeonato llevaban dieciocho puntos. Seis victorias en otros tantos partidos que auparon a los béticos a lo más alto de la tabla. El estreno soñado.
Dos años más tarde, en enero de 2015, Mel regresó al Benito Villamarín. Y la historia se repitió. Mejor dicho, casi se superó. Hasta el duodécimo partido del madrileño, el Betis no perdió. Seis victorias y cinco empates. Y de nuevo, en junio, objetivo conseguido.
El arreón optimista en A Coruña
Pero si las dos etapas de Pepe Mel en Heliópolis empezaron tan bien, la del Dépor no podía ser menos. Era marzo de 2017, y el madrileño aterrizaba en A Coruña para sustituir a Gaizka Garitano. El equipo herculino estaba sumido en una mala dinámica y marchaba décimo séptimo en la tabla, 3 puntos por encima de los puestos de descenso. Para más inri, el partido del debut de Mel no parecía nada fácil: llegaba el Atlético a Riazor entre semana. Sin embargo, los coruñeses consiguieron arrancar un empate (1-1). Y una semana más tarde, en Gijón, llegó la primera victoria. La buena racha seguiría con otro empate y otra victoria, hasta que en la quinta jornada con Mel al frente, el Dépor perdió el derbi gallego por cero a uno.
Este domingo, Mel regresará a Riazor, pero esta vez lo hará como visitante. La ciudad que le acogió durante siete meses en 2017 será ahora testigo de su debut con la Unión Deportiva Las Palmas. ¿Será capaz el ex del Rayo de repetir precedentes?