Los de Fernando Vázquez tuvieron la posibilidad de ponerse dos goles por delante, pero la falta de puntería y la cabeza de Marcelo evitó que ocurriese. Después, la calidad del Madrid y el cansancio de los gallegos pasó factura. La suerte esquivó al mejor Dépor de la temporada.
El Deportivo enderezó su rumbo anoche en Riazor. Y lo hizo contra uno de los nunca elegiría para hacerlo si le diesen la oportunidad. Sin embargo, el buen partido del equipo dirigido por Fernando Vázquez no fue suficiente para puntuar y continuar con la maldición que arrastra el Real Madrid en Riazor desde 1992. Tuvo que mover el banquillo José Mourinho para conseguir la victoria después de que el Dépor perdonase.
La primera parte fue impecable, con un Dépor rocoso atrás y saliendo con sentido a la contra. Sentido privilegiado que le dio Valerón, casi siempre al primer toque. «Te la doy y me ofrezco, y en cuanto me la des ponte a correr y ocupa los espacios». Ése es el juego que esbozó el grancanario sin importarle tener delante a hombres como Pepe o Modric, que entre los dos costaron 70 millones de euros. Riki, entregado, puso el 1-0 con más fe que calidad mientras que un Marcelo que había hecho renacer a Bruno Gama salvó sobre la línea lo que pudo ser la sentencia.
En el segundo acto, llegó el momento del Real Madrid. Mourinho puso en liza a Cristiano Ronaldo, Sami Khedira y Mesut Özil. Los alemanes le dieron contención y creatividad mientras el portugués marcó la diferencia. El Dépor, con una defensa condicionada por las bajas -Álex de lateral y Jesús Vázquez de central-, se vino abajo y cosecha su sexta derrota consecutiva, segunda con Vázquez en el banquillo.
LAS CLAVES:
Lesiones que impidieron dar aire al equipo. El hecho de tener que cambiar precipitadamente a Sílvio y a Kaká impidió que Fernando Vázquez tuviese más permutas para dar un poco de frescura al ataque coruñés en la segunda parte. Valerón y Bruno Gama, entre otros, terminaron el partido agotados.
Calidad y chequera desde el banquillo. Con el equipo agotado y ya con el empaque y el empuje que le dieron los Özil, Khedira y Cristiano al Real Madrid, el Dépor se acabó metiendo casi en su portería a defender. Kaká con un buen chut desde la frontal e Higuaín a placer dieron la segunda victoria a los merengues en Riazor desde 1992.
LO MEJOR:
La primera parte. El Dépor se mostró muy intenso y concentrado en defensa al inicio del encuentro. Una vez apuntaló su defensa dejó en manos de Valerón el juego de su equipo en ataque, y el ‘Flaco’ brilló. Brilló como en las grandes noches e hizo brillar a sus compañeros.
Peaje en la izquierda. El canario Ayoze, que ya disputó dos grandes encuentros esta campaña contra el Barcelona y en el derbi, cerró la autopista que tenía en las últimas fechas el Deportivo por la banda zurda. Nunca se complicó y su sentido táctico deja en evidencia el mostrado por Evaldo.
LO PEOR:
Casillero vacío. De poco sirvió el gran partido de los hombres de Fernando Vázquez en la primera parte pues finalmente los tres puntos volaron hacia tierras madrileñas. Por primera vez en la máxima categoría del fútbol español suma seis derrotas consecutivas.
Se reduce el margen de maniobra. Fernando Vázquez sigue confiando en conseguir en este último tramo de campaña «las ocho victorias que den la salvación». Ayer eran 8 victorias entre 14 partidos. Hoy ya son 8 triunfos en 13 duelos.