Por mucho que algunos se empeñen, el fútbol no funciona como una ciencia ni existen fórmulas matemáticas sobre cómo solucionar los problemas. Lo que sirve para unos no tiene que servir para otros y cada caso tiene sus particularidades, algo que se puede ver en el último rival del Dépor y el siguiente. Porque si al Sabadell el cambio en el banquillo le vino de perlas para reaccionar y salir del descenso, el reinicio en el Rayo Majadahonda ha dejado todo prácticamente igual que estaba… pero con tres meses menos de competición.
A finales de 2023, la directiva majariega decidió pasar página y prescindir de Carlos Cura para apostar por Jon Erice. El navarro, que puso fin a su carrera como jugador hace nos años y acreditaba experiencia en Segunda Federación en Mutilvera y Manchego, asumió el banquillo del cuadro madrileño con le objetivo de mejorar los resultados en 2024.
El Rayo Majadahonda se comió las uvas en 17ª posición después de haber sumado 15 puntos en 17 partidos. Estaba a cuatro de los puestos de permanencia y tenía al Teruel, colista, a cinco. Casi tres meses después, recibirá al Deportivo en el Cerro del Espino cerrando la clasificación con 24 puntos, a seis de los puestos que le permitirían jugar un año más en Primera Federación.
Sólo un triunfo en 2024, sólo dos equipos peores
Se han disputado 11 partidos en 2024, de los que el Rayo Majadahonda ha ganado únicamente uno. Fue en enero ante la SD Logroñés, uno de sus rivales directos y, curiosamente, uno de los dos equipos que han sumado menos que los majariegos en el nuevo año. El otro es la Real Sociedad B y su descalabro iniciado en Riazor. La dinámica vigente del Rayo es de 8 partidos sin conocer la victoria, aunque en las últimas dos semanas han experimentado una ligera reacción sumando dos empates – el último especialmente meritorio ante el Arenteiro – después de tres derrotas consecutivas.