Tras casi dos meses de baja, José Ángel volvió a tener participación con el Deportivo en el tramo final del último encuentro frente al Zaragoza. Ya recuperado de su pubalgia, el centrocampista sevillano se pasó por los micrófonos de Riazor.TV para hablar de su lesión, la situación del equipo y la previa del partido de su regreso a Tenerife.
Una lesión complicada
«Cuando tienes una lesión muscular o algo que tiene unos plazos más fijos sabes cuál es la fecha de caducidad y cuando vas a volver al césped. En este caso es diferente porque teníamos que esperar a ver cómo iba evolucionando el tratamiento conservador. El futbolista es impaciente de por sí. Nos pusimos un plazo de 6-8 semanas, estuvimos seis o siete y ya estoy de vuelta. Con muchas ganas porque cuando estás fuera te das cuenta de lo que realmente echas de menos el fútbol y poder ayudar a tus compañeros».
Su visión desde la grada
«Viendo el partido desde fuera del campo soy como un aficionado más. He intentado siempre tener una labor importante. Cuando un jugador está lesionado se siente como fuera del equipo, el hecho de no ir a los partidos de fuera, a los viajes… Me considero muy compañero de mis compañeros. Cuando ganábamos he intentado mantener esa positividad y cuando han venido derrotas o empates dolorosos intentar ayudar a mis compañeros a que se dé un poco la vuelta, mi labor ha sido esa. Le he dicho a algún compañero que le iba a quitar el puesto a Joaquín, el psicólogo».
Áreas de mejora del equipo
«Creo que en las primeras jornadas donde más fallos teníamos era de cara al gol. El equipo jugaba bien, estaba bien preparado en los partidos y recibíamos ocasiones como cualquier equipo del mundo. Nosotros hacemos muchas cosas bien, pero nos estaba penalizando el tema de las áreas y, a nivel defensivo, el balón parado. A nivel de juego, compromiso y actitud no creo que sea debatible; yo no tengo otro objetivo que no sea estar con el Dépor lo más arriba que se pueda y, si es posible, conseguir otro ascenso».