La lesión de Nélson Oliveira complica las variantes ofensivas de Oltra, que se queda como única referencia con un Riki marcado por sus continuas recaídas musculares del pasado. Bodipo espera su oportunidad en el banquillo.
El pasado domingo, cuando Nélson Oliveira sustituyó a Riki en el minuto 67 del partido que enfrentaba a Deportivo y Mallorca, nadie se esperaba que solamente fuese a estar sobre el tapete de Riazor durante apenas un cuarto de hora. Ese fue el tiempo que tardó en sufrir una rotura de grado 2 en el psoas ilíaco izquierdo que obligó a José Luis Oltra a recurrir a Rodolfo Bodipo como referencia ofensiva hasta el final del encuentro, una situación que podría ser la tónica habitual durante el próximo mes de competición, el plazo mínimo previsto hasta que el luso recupere su estado físico normal.
Si bien es cierto que el internacional portugués no se había estrenado como titular en la Liga BBVA, se encontraba dentro del selecto grupo de futbolistas que emplea el míster valenciano en las rotaciones y participó en todos los duelos disputados hasta la fecha por la entidad blanquiazul en el campeonato liguero. En la mayoría de ellos, lo hizo sustituyendo a un Riki que se mantenía como la clara primera opción del técnico deportivista, en buena medida gracias a los tres goles que ha anotado en este arranque del curso.
El madrileño está más consolidado que nunca desde que aterrizó en A Coruña allá por la temporada 2006-07. De hecho, durante la rueda de prensa conjunta con Álex Bergantiños, Ernesto Bello anunció esta misma mañana que era una de las renovaciones prioritarias para el conjunto presidido por Augusto César Lendoiro. Además, el secretario técnico descartó incorporar a ningún ariete durante el mercado invernal para suplir la baja de Oliveira ya que “si antes no lo encontrábamos, ahora es más difícil”, explicó.
Mientras tanto, es Bodipo quien espera con ganas una oportunidad que se le resiste en los últimos años. A pesar de no contar con la confianza de su entrenador, el exfutbolista del Alavés decidió permanecer en el club para cumplir su contrato, que expira en junio de 2013. Oltra es consciente de la situación e intentará correr el menor riesgo posible con un Riki lastrado por su amplio historial médico. El guineano aguarda expectante en el banquillo.