Desde comienzos de 2015 únicamente cinco equipos de la mitad baja de la tabla en la Liga BBVA han logrado encadenar tres encuentros consecutivos sin perder: Real Sociedad, Deportivo, Almería, Elche y Córdoba.
Ocho jornadas han transcurrido ya desde el inicio del año nuevo, pero la vida sigue igual en la casa del pobre. Sigue igual, en parte, porque el macabro guión de esta edición 2014-2015 de la Liga BBVA ha convertido las emboscadas en el principal argumento de la trama para sus actores secundarios. Y es que a estas alturas de la competición apenas cinco equipos de los enmarcados en la zona caliente de la clasificación han logrado sumar tres choques seguidos sin conocer la derrota en 2015.
Curiosamente, uno de ellos es el Deportivo de Víctor Fernández. Pese a las numerosas dudas sembradas a comienzos de curso sobre la capacidad del equipo para dar la talla en situaciones extremas, precisamente fueron sus dos victorias ante Rayo Vallecano (1-2), Eibar (2-0) y un empate ante el Granada (1-1) los que lograron abrir una pequeña brecha provisional de hasta cinco puntos con respecto a la antepenúltima posición, ocupada momentáneamente por un Levante que disputará esta noche un duelo fraticida ante el conjunto nazarí.
Otro de los cuadros que parecía haber dado un paso adelante en las últimas semanas era el Almería. El equipo andaluz, que había sumado dos triunfos consecutivos ante Getafe (1-0) y Córdoba (1-2), además de un valioso empate ante la Real Sociedad (2-2), frenó momentánemente su recuperación tras la aparición en escena del Atlético de Madrid, que derrotó por un contundente 3-0 a los de Juan Ignacio Martínez el pasado fin de semana en una apabullante muestra de poderío de los hombres de Diego Simeone.
De hecho, si algo llama poderosamente la atención es precisamente eso. A excepción de la Real Sociedad, las correspondientes rachas de Deportivo, Almería, Elche y Córdoba han sido sesgadas por Real Madrid, Barcelona o Atlético de Madrid, lo que, a mayores de impedir el progreso de dichos equipos, también ha coincidido con un pequeño bajón anímico de todos ellos. Y es que ninguno logró recuperarse de forma inmediata. El caso más sangrante es el del Córdoba, que desde la visita del Real Madrid al Estadio Nuevo Arcángel también ha perdido sus cuatro partidos posteriores.
Sin embargo, uno de los equipos a los que más se ha mirado de soslayo en las últimas jornadas desde la parte baja de la tabla es el Eibar de Gaizka Garitano. El conjunto armero, que inició el año 2015 de forma brillante con dos triunfos ante Espanyol (1-2) y Getafe (2-1), dio paso en Anoeta a una peligrosa inercia negativa de resultados que, con el trasfondo del traspaso de Raúl Albentosa -firmado por el Derby County inglés- y la lesión de Manu Del Moral, ha llevado a los eibarreses a acumular hasta cinco tropiezos ininterrumpidos.
