Rubén de la Barrera afronta su primer partido decisivo con el Deportivo después de dos ensayos generales para abrir boca. En 180 minutos ha tenido tiempo de someter a la plantilla a diferentes test que le han permitido al técnico coruñés tener más o menos claro su once salvo pequeños matices que, sobre todo, se concentran en la línea defensiva.
La baja de Alberto Quiles aclara el panorama en ataque. Lucas Pérez es el buque insignia, mientras que Yeremay es el jugador que más ha aprovechado el cambio en el banquillo. Titular ante el Algeciras y en Pasarón, el canario ha dado un paso al frente para ocupar el extremo izquierdo. Arriba, todo lo que aporta Max Svensson le da ventaja sobre un Arturo que está inédito. Kuki, Saverio y un Mella que ha irrumpido con fuerza, apuntan a alternativas desde el banquillo.
En el centro del campo, como Yeremay, también ha emergido la figura de Álex Bergantiños, que se presume el mediocentro más fiable junto a Diego Villares. Mario Soriano, reservado ante el Pontevedra, será el tercer hombre en la medular, como ya lo hizo ante el Algeciras.
El costado derecho del muro
De hecho, el once que el domingo salte a Riazor para medirse al Castellón tiene muchas papeletas de ser similar al que goleó al cuadro andaluz en el estreno de De la Barrera. Con Mackay bajo palos, Lebedenko y Pablo Martínez son también fijos, mientras que la incógnita está en el costado derecho del muro.
El técnico le ha dado confianza a Trilli. Dos partidos completos en los que el joven lateral ha demostrado que quizá podía haber sido de ayuda en los últimos meses, pero también que todavía está lejos de su mejor nivel. Antoñito, que acabó la etapa Óscar Cano con molestias, no ha jugado todavía tras el cambio de entrenador, por lo que hay dudas en la posición.
También en el acompañante de Pablo en el eje de la defensa. Lapeña fue el primer elegido por Rubén y su capacidad en la salida de balón puede ser un factor decisivo. Pero tanto Jaime como Pepe demostraron estar listos en Pontevedra y, sobre todo en el caso del primer, podrían hacerse un hueco en la alineación.