Todavía no ha terminado la jornada 14 en Segunda División y tres entrenadores ya han sido destituidos. El primero en caer fue Manolo Jiménez el viernes tras el empate en casa, cuando Las Palmas decidió fulminarlo en el momento. El siguiente fue Rubén Baraja después de ser derrotado en el derbi asturiano frente al Oviedo por 2-1. Un duro varapalo que le ha costado el puesto. José Ramón Sandoval corrió la misma suerte después de que el Córdoba cayese en su campo ante el Cádiz por el resultado de 1-3. El conjunto andaluz, en descenso, no podía permitirse un resbalón así..
Natxo González, entrenador del Deportivo, habló en la rueda de prensa previa al choque frente al Almería de la precaria situación que viven sus compañeros: “Que en la jornada 13 ya hayan caído tantos entrenadores habla de la situación que vivimos los hoy en día, cuando esto no ha hecho más que empezar. Uno no conoce la situación del día a día desde fuera, pero son números preocupantes y alarmantes”.
De siempre es sabido que el eslabón más débil en un equipo es el entrenador, desde los más grandes hasta los más modestos. Lo que se convierte en llamativo es que hayan sido destituidos ocho técnicos en 14 jornadas de campeonato. Desde Joseba Etxeberria hasta José Ramón Sandoval. Desde septiembre hasta noviembre. En apenas dos meses.
El ex entrenador del Tenerife fue el primero de esta cadena, cuando el conjunto canario marchaba decimonoveno. En su puesto duró más de 200 días y en su lugar llegó José Luis Oltra, que no termina de conseguir revertir la situación. El segundo estratega en ser despedido fue José Antonio Gordillo, que dejó al Nástic en la última posición. Para corregir sus errores cogió las riendas Enrique Martín, que tampoco ha cambiado la dinámica.
El Zaragoza fue el siguiente club en optar por el camino rápido. Imanol Idiákez fue cesado de un cargo en el que apenas llevaba 100 días. Lucas Alcaraz fue el elegido para relevarle. Lo siguió Javi López, técnico del Lugo, que dejó al cuadro gallego en la decimosexta posición de la tabla. En su lugar llegó un Alberto Monteagudo que mantiene a los suyos un escalón inferior a su sucesor.
Ya en Noviembre, el Extremadura decidió despedir a Juan Sabas y nombrar a Rodri como nuevo técnico. El madrileño no llegó a los 200 días a cargo del equipo, y es que su puesto en la tabla pesó a la directiva extremeña. Con la destitución de este último llegamos a la actual jornada, en la que han caído tres técnicos. Quizá la más sorprendente sea la de Manolo Jiménez, con Las Palmas en puestos de promoción para ascender a Primera División. Aun así, el conjunto canario decidió llamar a Paco Herrera para que coja las riendas del club.