La crueldad se ha vuelto a cruzar en el camino de Mario Soriano en una nueva promoción de ascenso. El centrocampista ha dicho adiós a la temporada y al conjunto armero después de caer en las semifinales del playoff ante el Real Oviedo en un encuentro igualado decidido en dos errores de los vascos. Es la tercera ocasión de manera consecutiva en la que los eibarreses pierden de esta forma y también para el propio Soriano, que ya lo experimentó en el Deportivo los dos últimos cursos.
El Eibar partía con la ventaja de haber quedado en una mejor posición durante la temporada regular, lo que en caso de empate suponía el pase a la final. Con el 0-0 del encuentro de ida, su rival ovetense se veía obligado a marcar para seguir vivo y así lo hizo. En un desajuste defensivo Alemão hizo el primer tanto de la noche y Sebas Moyano dobló la ventaja tras un robo de Borja Bastón en campo rival como respuesta a una equivocación de Arbilla.
Buscó la portería rival el equipo de Joseba Etxeberria, pero la mala fortuna en los disparos hizo imposible la remontada. El propio Mario Soriano dispuso de una gran ocasión desde la frontal del área, pero al igual que los de sus compañeros, su chut se marchó rozando el palo y provocando el lamento de la afición. Así fue la despedida del madrileño de Ipurua, donde ha sumado una gran cantidad de minutos y buenas actuaciones en su primer año en la categoría de plata.
El Eibar, nuevo rival del Deportivo
Así las cosas, el Dépor ya conoce a un rival más de cara a la próxima campaña. Los blanquiazules volverán a pisar al Eibar tras seis años en los que no se han cruzado al estar en categorías diferentes. Únicamente quedan cuatro rivales por conocerse: dos que ascenderán desde Primera Federación y dos que caerán en el playoff. Una cuenta atrás para que el balón vuelva a rodar en Riazor en el fútbol profesional.