El centrocampista balcánico jugó los 90 minutos en el encuentro que la selección balcánica disputó en Haifa, que finalizó con un 3-0 favorable al combinado israelí.
Malas noticias para la Bosnia de Haris Medunjanin. El conjunto entrenado por Safet Susic sucumbió ayer por 3-0 ante la líder del grupo B, Israel, e hipotecó parte de sus opciones de acudir a la Eurocopa 2016 que se disputará en Francia. A falta de seis partidos para la conclusión de la fase de clasificación, el equipo balcánico no logró sobreponerse a la ausencia de su gran estrella, el delantero del Manchester City Edin Dzeko, y sumó su cuarta cita oficial sin vencer, una circunstancia que ha relegado a los bosnios a la penúltima posición del grupo con dos puntos, tres por debajo de la teórica favorita, Bélgica.
Medunjanin, que en su vuelta a Israel -jugó dos años en el Maccabi Tel Aviv- partió en el once inicial planteado por Susic, acompañó a Besic y Hadzic en una medular que perdió la batalla ante la dupla conformada por Eran Zahavi y Bibras Natcho. Fue precisamente una asistencia de Zahavi la que habilitó a Gil Vermouth para inaugurar el marcador en el minuto 35. Apenas diez minutos después, Omer Damari puso el 2-0 en el electrónico. El centrocampista del Deportivo, que probó suerte durante la primera parte con varios disparos lejanos y algunos pases en profundidad a Hajrovic y Lulic, no escapó al mal partido de una Bosnia donde sólo se salvó el guardameta del Stoke City Asmir Begovic.
Bosnia, que sufrió la temprana expulsión del central Toni Sunjic, que derribó a Damari en un contraataque de los hombres de Eli Guttman. Mateu Lahoz mostró la tarjeta roja al zaguero del Kuban Krasnodar y dejó a Bosnia con diez hombres, con lo que el trabajo defensivo se multiplicó para Medunjanin en el segundo periodo, que no pudo hacer nada en el último tanto de los israelíes, certificado por Zahavi en el minuto 69. El combinado comandado por Susic queda así a siete puntos del liderato del grupo B, ocupado por Israel con un partido menos.