Sigue el Deportivo componiendo su plantilla de la próxima temporada y el último en llegar ha sido Roberto Olabe. El mediocentro llega procedente del Alcorcón, donde ha terminado contrato este curso con el descenso a Primera RFEF, y firma hasta 2024. Al cuadro de Santo Domingo había llegado en el mercado de invierno tras desvincularse del Eibar.
Olabe se formó en la cantera de la Real Sociedad y todavía en etapa de formación se marchó al filial del Atlético de Madrid. Ha cumplido recientemente los 26 años, pero ya acredita más de 100 partidos entre Segunda División, Segunda B y la Primera División de Portugal jugando en el Tondela a las órdenes del también español Paco Ayestarán.
Esta campaña comenzó en el Eibar, club que se hizo con sus derechos en 2019, aunque no ha tenido demasiada participación en Ipurua. Ha pasado por Extremadura y Albacete en la categoría de plata antes de terminar el pasado mes de enero en el Alcorcón. Allí jugó 15 partidos, 13 de ellos como titular, y superó los 1.000 minutos en media liga.
Olabe, perfil zurdo para el centro del campo del Deportivo
Con la llegada de Roberto Olabe, el Deportivo sigue dándole forma a un centro del campo que tendrá que reconstruir prácticamente de cero. Llegó Isi Gómez para el perfil diestro y ahora llega Olabe, zurdo, que previsiblemente se asentará en la zona que ocupaba Juergen Elitim.
Con ellos, además de Diego Villares y Álex Bergantiños, Borja Jiménez ya cuenta con cuatro futbolistas en una sala de máquinas en la que el curso pasado llegó a tener hasta seis futbolistas. Es previsible, más allá de las oportunidades que se le puedan abrir a Brais Val, que terminen llegando otros dos centrocampistas para igualar esa máxima de «dos jugadores profesionales por puesto» que Antonio Couceiro volvió a pregonar el pasado martes en rueda de prensa.