El catalán anotó de cabeza el gol del empate y el meta canario se erigió en salvador en el último suspiro con una parada espectacular. Antes, Lucas había rozado el 1-2 con un disparo al poste. (1-1)
Se había rumoreado durante toda la semana sobre los distintos cambios que barajaba Víctor Sánchez del Amo para la visita a La Rosaleda, pero aún así sorprendió el técnico con su alineación. Pese al debate, Juanfran se mantuvo como lateral derecho; Insua fue el que ocupó el puesto de Sidnei en el eje de la zaga; y la principal novedad la protagonizó Juan Domínguez, que regresó a la titularidad por primera vez desde el mes de enero y se situó en banda izquierda, posición que no pisaba desde los tiempos de Lotina. Arriba, Cavaleiro acompañaba a Oriol Riera dejando así a Lucas Pérez arrancando desde la derecha para buscar a la contra los espacios que concedía un Málaga siempre muy abierto.
Tras un mal arranque en el que se pudieron adelantar los locales en varias ocasiones, disponiendo Juanmi de la más clara con un disparo al palo, fue a partir del minuto 25 cuando se empezó a entonar el Dépor y a igualar poco a poco el partido hasta terminar mejor que los andaluces. Por dos veces, rozó el gol Lucas Pérez con disparos desde dentro del área, pero se encontró con Kameni: primero, le pegó con la derecha a las manos del meta y después se sacó un gran zurdazo pero el camerunés voló para enviar a córner.
Además, Luisinho comenzó a convertirse en uno de los hombres de la primera mitad, con continuas incursiones por la izquierda que siempre llevaron peligro, ya fuese al forzar saques de esquina o con centros al área que a punto estuvieron de ser rematados a gol.
A la vuelta del descanso, arrancó aún más loco el encuentro de lo que ya estaba en la primera mitad, con tres ocasiones y un gol en apenas dos minutos. Avisó Amrabat, contestó Lucas con un remate arriba tras una contra, y en la acción siguiente sí acertó el marroquí para batir a Fabricio con un potente disparo desde la frontal.
Pese al 1-0, no se vino abajo el Dépor, que incluso mejoró su ataque posicional y llegó al área rival con más frecuencia, pero otra vez apareció Kameni, esta vez para desviar un centro que esperaba Lucas en área chica. Y fue ahí, en el mejor tramo deportivista del partido, cuando llegó el premio al trabajo de Víctor Sánchez del Amo a balón parado. En el tercer partido con el madrileño en el banquillo, el Dépor anotó su primer gol de estrategia de la temporada: Lucas la puso de vicio desde la derecha y Oriol se impuso en el punto de penalti para cabecear a la red.
Con el 1-1, sí empeoró el Dépor, superado durante varios minutos y siendo sostenido en el encuentro por Fabricio, que realizó una gran parada a un disparo desde la frontal. Ya en el 83, llegó el momento más incomprensible del partido y con peor fortuna blanquiazul, con un libre directo de Lucas que pegó en el palo, se paseó por la línea e increíblemente no entró en la portería malagueña.
En el descuento y ya cuando el Deportivo parecía agotado, tuvo que aparecer de nuevo Fabricio para salvar el punto con una parada monumental a cabezazo a bocajarro de Juanmi. Con este empate, los herculinos salen momentáneamente del descenso con 29 puntos, a espera de lo que haga el Almería (vs Eibar a las 17:00), pero suman ya once partidos sin vencer. El choque ante el Elche del proximo miércoles, absolutamente vital.
Málaga: Kameni; Rosales, Sergio Sánchez, Weligton, Boka; Darder (Guerra, min. 79), Recio; Samuel (Horta, min. 73, Castillejo (Duda, min. 64); Amrabat y Juanmi.
Deportivo: Fabricio; Juanfran, Lopo, Insua, Luisinho; Álex B., Juan Domínguez, Borges; Lucas, Cavaleiro (Salomão, min. 77); y Oriol Riera (Postiga, min. 81).
Goles: 1-0, Amrabat, min. 46. 1-1, Oriol Riera, min. 60.
Árbitro: Estrada Fernández, del colegio catalán. Mostró tarjeta amarilla a Insua, Weligton, Sergio Sánchez y Amrabat.