Óscar Cano ya sabe lo que es celebrar un triunfo con el Deportivo. En su estreno como entrenador consiguió doblegar al Linares de Alberto González. Con los goles de Quiles y Rubén Díez los blanquiazules vuelven a entrar en el grupo de cabeza.
Análisis del Deportivo – Linares
«El equipo necesitaba ganar. Las buenas sensaciones del entrenamiento había que llevarlas a la victoria del domingo, que es donde importan las cosas. El partido ha empezado con mucha igualdad, con un equipo animoso como es el Linares. Cuando los equipos están arriba no es casualidad, tienen buenos jugadores y un entrenador que sabe de qué va esto. Nosotros hemos estado mejor en la primera parte, hay un arreón de quince o veinte minutos muy buenos, se hacen dos goles, parece que nos desperezamos. Por fin marca Quiles y viene en un momento muy delicado el gol de ellos. Los mete en el partido y la segunda parte ellos tenían que dar un paso adelante, lo han dado. Hubo ruído pero no hubo grandes ocasiones. Nosotros por contra y a la contra, hemos podido sentenciar. Hemos tenido la de Mario y otra acción más. Nos tocó sufrir, tiraron jugadores contra última línea y siempre se provoca la incertidumbre de un rechace que puedan hacer gol. Muy feliz por los chicos y por la gente. Es lo que necesitábamos ante un buen Linares. Con una victoria las semanas se hacen mejores para trabajar».
El partido de Svensson
«Necesitábamos en este caso y en este partido un delantero que fuese al espacio, que los preocupara, que los comprometiera. Que les hiciese sentir incomodidad. Estoy muy contento con él. Tenemos que utilizar todos los recursos de la plantilla. El recurso que considerábamos que tenia que existir eran unas capacidades concretas que tenía Max».
Lo que más y menos le ha gustado del Deportivo – Linares
«Lo que más, el alma con el que han jugado. Hubo situaciones de perder el balón y activarse todo el mundo. Quitando lo último donde es muy difícil, buena gestión de resultado, secuencia de pases. Los veinte minutos de la primera parte, hemos sido arrolladores. Se ha generado un clima precioso, con qué poquito se ha conseguido. No me gustaron ciertas pérdidas, haber encajado el gol. Lo más importante en el fútbol es ganar».
El rol de Álex Bergantiños
«Es una cosa que hacía el año pasado y lo hacía muy bien. Álex puede jugar en la primera línea como central interno y también delante de primera línea. En la primera parte lo hicimos varias veces, ellos fueron muy activos en la presión contra primera línea. Pretendíamos que no hubiese muchos pases hacia Mackay, ese pase y esas distancias aceleraban su proceso defensivo. El tercer elemento en primera línea, tanto Raúl como Antoñito y la exhibición de juego de Quiles, nos permitían salir con la pelota con mayor facilidad, hacer que estuviésemos más juntos, que pudiésemos tirar hacia adelante y que tanto Quiles como Mario estuviesen cómodos. Cuando ellos se reajustan nosotros damos otro paso. Los partidos los jugamos los entrenadores, en el sentido de poder decidir en función de lo que haga el rival. Con Álex buscamos más seguridad en defensa y una mejor gestión del balón. Había mucha distancia entre los centrales y los pases eran muy previsibles. En la primera parte lo intentamos con Rubén en el perfil derecho, pero lo matizamos después con el capi».
El partido de Rubén Díez
«Los buenos tienen que estar siempre en el campo. Rubén es ese jugador capaz de hacer jugar bien a los demás, este tipo de jugadores bajo mi punto de vista son utilizados por delante de los centrocampistas, lo importante es encontrarlos. A no ser que sean muy buenos los que tienen que encontrarlos, prefiero que junte a los demás. Estamos hablando de un jugador de otra categoría, quizá su problema es que nunca se lo ha creído. Yo lo llamé para Castellón, tenía 25 años, llevaba un rato en Segunda B. Toda su trayectoria en Tercera en la zona de Aragón, posiblemente no haber tenido esas experiencias previas haga que crea que no es tan buen como realmente es. Tiene que dar mucho más en defensa, muchísimo más. Espero que lo dé, debe darlo. Debe ser un jugador que lo aporte en esa fase del juego».
El gol de Quiles
«Es un chico que vive del gol, viene de hacer una temporada sensacional. Empieza la temporada y ve que en 7 jornadas no ha marcado. Le afecta a cualquiera que vive de eso. Eso denota compromiso. Querer aunque te angustie. Se le van a caer los goles, los tiene. Tiene muchísimo peligro. Tiene una facilidad para intuir espacios donde se provoca lo más importante del fútbol, que es el gol. Es muy importante para todos nosotros».
El plan de juego de Óscar Cano
«Quiero tirar mucho pero tirar bien, que el balón esté en su área y no en la mía. Eso viene por el vuelo que pueden tomar tanto Raúl como Antoñito, igual que Trilli cuando esté o Retu. Alineas a Mario, a Quiles que es un delantero disfrazado de extremo, tienes a Max que es la velocidad en persona, con su ansiedad por ocupar espacios en profundidad. Tienes a Olabe que dentro del campo que quiere presionar hacia delante. Si metes todo lo que estoy diciendo sale lo que ha salido. Hemos sido algo precipitados en algunas ocasiones, cada jugada tiene su ritmo, su coyuntura. Hay que saber interpretarla, darle el tiempo exacto. Pero hay un segundo factor, la presión que tienen dentro y que necesitaban soltarla. Hacía falta una buena victoria. Estoy impresionado. En esta ciudad te reconoce todo el mundo, se respira fútbol, grandeza. Pero nos va a ir mucho mejor si somos humildes, que lo somos. Los equipos que vienen son buenos equipos. Con esa grandeza y esa humildad podremos hacer muchas cosas».
Su sentimiento
«Es una pasada. No tiene ningún tipo de comparación. En España quitas cuatro o cinco aficiones y esto no existe. No solo por cantidad. Antes de los goles hubo dos acercamientos, con eso nada más, se generó un clima que yo pensaba que era insuperable. Si somos capaces de conectarnos con ellos, si hacemos una buena comunión, es imparable».
Los cambios
«Y el papel de los que han participado menos, no es fácil. Villares, Kuki, Gorka, Ibai…me quedo con el esfuerzo de Ibai. Es una maravilla. Tiene una trayectoria importante en Primera División, se pone el mono de trabajo, anima, corre. Ese es el ejemplo. El nivel de un equipo se detecta porque lo reflejan los que menos participan. Hoy han sido un ejemplo absoluto».
Alberto González: «Nos faltó peso en el juego»
«Me voy con una buena sensación. Con la de que mi equipo sigue compitiendo, dando la cara por donde va. En la segunda parte hemos dado un paso más de cara a ser conscientes de que podíamos ganar en este campo. En la primera no estuvimos convencidos. Nos faltó peso en el juego. Hemos tenido fases con más tiempo de balón. Nos ha faltado el gol que nos diera el empate. Contento con cómo ha trabajado el equipo».
En cuanto a si le ha sorprendido el once, destacó que «dentro del once que pensábamos que iba a sacar hay un par de cambios. Pensábamos que Villares podía jugar y que lo haría Santamaría. Esperábamos la libertad de Rubén Díez, ha sido un equipo que trata de llevar la iniciativa, mantiene la profundidad en los laterales».
Sobre el papel de Óscar Cano, explicó que «prácticamente he dicho todo de él. Lo conozco desde que estábamos empezando, yo llegué a Granada con veinte años y allí estaba él. Es un entrenador que no hizo carrera porque no quiso, entendía que era mejor ser autodidacta y estudiar por su cuenta que una formación reglada. Pero era el primero que estaba allí todos los días. Desde hace veinte años lleva dando vueltas y mostrando que es un gran entrenador. Sus equipos saben a lo que juegan y me parece un buen tipo».