El Deportivo regresó este miércoles al trabajo en Abegondo para empezar a preparar ya el derbi de este domingo con el Lugo en Riazor. Todo va sobre ruedas para el equipo blanquiazul desde hace semanas, también en lo que respecta al estado físico de la plantilla. Sin lesiones graves, el foco de la enfermería está puesto sobre Pablo Martínez, que continúa apurando su recuperación tras el esguince de rodilla sufrido ante el Tarazona.
El central francés ha empezado la semana al margen del grupo, pero todavía no está descartado para esta jornada. Todo dependerá de cómo evolucione, sobre todo en el momento que vuelva a trabajar con normalidad, cuando empiezan los giros y cambios de dirección. Idiakez aseguró en la previa del duelo con Osasuna B que contaba con él para Tarragona, pero que todavía tenía esperanzas en recuperarlo ya esta semana.
Además de Pablo Martínez, otros dos jugadores del primer equipo trabajaron en el gimnasio por diferentes molestias físicas. Balenziaga, sustituido a la media hora en Tajonar por una indisposición, volvió a bajar el ritmo de trabajo en el primer día como ya hizo la semana pasada, pero en principio no debería tener problemas en llegar a tiempo. Tampoco se ejercitó con todos Salva Sevilla, baja ante Osasuna B por una contractura en las cervicales, y que sigue aparte con trabajo personalizado.
Martín Ochoa, entre algodones
Tampoco se está entrenando con normalidad Martín Ochoa. El delantero fue baja en el partido entre el Fabril y el Ourense CF después de entrar en la convocatoria sin que el club informara de ningún problema físico. Este miércoles salió con el resto de la plantilla para escuchar la charla inicial sobre el césped, pero se retiró junto al resto de tocados para realizar también trabajo de gimnasio.