Entre todos los temas de actualidad que trató Óscar Cano en la entrevista con RiazorTV, no podía faltar el de la cantera. El técnico explicó su visión y también deslizó uno de los nombres que le ha llamado la atención en el juvenil de Manuel Pablo. Un futbolista que ya entrena de forma regular con el primer equipo.
«Hay tantos intereses en torno a los chavales… desde la llamada de otros clubes sin que eso suponga que los llamen ya para jugar en sus primeros equipos. La prisa que tiene todo el mundo en una sociedad que nos llama al vértigo. Tiene que ser todo y ya, a poder ser ayer, no para hoy. Hay mucho fracaso relacionado con esto. Hay entrenadores muy populistas, que se apuntan un tanto por uno de esos debuts en Primera División de quince canteranos y se vanaglorian y van hablando de lo bueno que es uno que al final se estableció en primer equipo. No se habla de los otros catorce a los que les arruinó la vida por precipitar las cosas«, inició.
En cuanto al Deportivo, explicó que «es similar a todos los lugares donde he estado. Es similar al Betis, donde yo llevaba al filial. Son jugadores que ves desde pequeños, desde el infantil, cadete, juvenil… es humano y acertado querer que cuantos más mejor en la primera plantilla. Y yo pienso así. Ojalá pudiese cada equipo y cada club tener siete u ocho canteranos en sus filas».
Sobre la irrupción de los canteranos, destacó que «hay gente que derrumba la puerta con una fuerza tremenda, que no hay posibilidad de no ponerlo. Es el caso de Gavi en el Barça. Hay otros con los que hay que ir poco a poco, algunos aprovechan la baja de un compañero o que el club no pueda hacer una gran inversión esa temporada hablando de Primera División. A mi me contrataron para ascender, yo no miro si es canterano o no. Si veo un cadete que me asegurase que íbamos a ser mucho mejores con él lo pondría ya mismo. A partir de ahí estoy muy atento. Subo todos los días a tres o cuatro de la cantera. Algunos se han asentado en la dinámica del primer equipo y hay gente que me llama la atención».
Óscar Cano estuvo en la remontada de Copa del Juvenil al Atlético de Madrid. «Ayer vi a otros dos chavales a gran nivel, que espero que todo eso que anuncian no se quede ahí. Al final no es que el entrenador del equipo no los pone, se generan unas expectativas y a veces son ellos los que no soportan ese peso de decir ‘tengo que venir aquí y hacerlo siempre bien’, no es fácil. Ayer destaco a siete u ocho chavales, me gustó mucho el juvenil. Tuvieron un alma tremenda, la primera parte no era fácil jugarla. Empezamos bien, con ocasiones claras, se ponen 0-2 y salen con alma, con generosidad, se vio que íbamos a ganar. Cuando vas a ganar no es solo el alma, hay calidad en el equipo, me gustaron muchos chicos».
Y ahí, deslizó un nombre. «Me gustó mucho un jugador que es juvenil. Entrena como nosotros de forma habitual. Diego tiene una personalidad tremenda para jugar al fútbol y lo hizo ante todo un Atlético de Madrid».
Por último, Óscar Cano destacó que «miramos mucho hacia abajo, me interesa mucho saber. Martín Castiñeira nos suele decir quienes son los talentos de los juveniles. Yo no había tenido la oportunidad de verlos todavía, ya que nos coinciden sus partidos viajando y algunas veces jugando, tenía ganas de verlos y me empapé. Ya tengo una visión clara de cómo es el equipo de Manuel Pablo, quienes son los chicos a los que se les atisba una progresión mayor. Ojalá no sean solo ellos, también los que vienen de atrás que son cartas marcadas puedan llegar. Y más que llegar, asentarse, que es lo más importante. Todos tenemos urgencias, decimos que este es bueno, lo ponemos en los altares y al primer regate que no sale ya decimos que no es tan bueno. Detrás de esos niños hay un ser humano, que está alejado de su núcleo familiar, que tiene 16 o 17 años y con el que hay que tener muchísimo cuidado».