El Deportivo recibe este domingo en Riazor al Langreo en un partido absolutamente fundamental para los blanquiazules. El cuadro asturiano llega ya sin objetivos clasificatorios pero intentará cuajar un buen encuentro en uno de los mejores estadios de la categoría que contará, por primera vez en la temporada con 5000 aficionados.
El Langreo se caracterizó en la primera liguilla por ser un equipo realmente peligroso lejos de su campo y logró sumar 13 de los 27 puntos en juego. Además consiguió victorias de mucho prestigio como la de la jornada tres ante el Burgos en el Plantío por cero goles a dos.
En la segunda fase de campeonato sus desplazamientos a Galicia se tradujeron en partidos igualados. Hace unas semanas caía en A Malata por un gol a cero y solo dos semanas después sacaba un punto de San Lázaro al empatar en el tramo final de encuentro con un gol de penalti.
Si algo ha caracterizado la temporada del Langreo es la competitividad mostrada en todos sus partidos. De los 22 partidos que ha jugado hasta la fecha solo ha perdido por más de un gol en uno de ellos. Fue en la antepenúltima jornada de la primera fase y lo hizo en León ante la Cultural al caer por tres goles a uno.
El conjunto asturiano ya fue capaz de darle un susto al Deportivo en el encuentro disputado hace tres semanas. Un solitario gol en el tramo final del choque condenó a los blanquiazules y complicó su clasificación. Uno de los protagonistas de ese partido, el atacante Allyson hacía referencia en una entrevista esta misma semana a las sensaciones que tuvo sobre el terreno de juego.
El Deportivo tratará de imponer su juego y sobre todo sus resultados positivos en Riazor para evitar sustos e intentar dejar sentenciado su pase a la Primera RFEF. Para ello deberá superar a un equipo rocoso y que ha tenido un buen comportamiento lejos de Asturias.