Javi Montero, central del Racing de Santander, regresa a Riazor cuatro temporadas después de su paso por el Deportivo. Solo que lo hace convertido en uno de los indiscutibles de un equipo que domina la clasificación de LaLiga Hypermotion, cediendo tan solo una derrota. A sus 25 años, Montero ha evolucionado desde aquella cesión desde el Atlético de Madrid, bendecido por un Simeone que ya había contado con él para el primer equipo.
La carrera de Javi Montero hasta llegar al Racing de Santander
Javi Montero llegó en 2014 al Atlético de Madrid, en edad cadete. A los 19 años, Simeone se fijó en el central para que hiciera la pretemporada con el primer equipo. Con sus características gafas protectoras –había sido operado de un desgarro de retina- llegó a jugar más de una decena de partidos repartidos en tres competiciones, Liga, Copa y Champions.
La temporada siguiente llegó en calidad de cedido al Deportivo, acompañado por Mollejo. Jugó 30 partidos, siendo titular en 29 de ellos, en una temporada en la que tuvo hasta tres entrenadores –Anquela, Luis César y Fernando Vázquez– y que terminó con el traumático descenso a lo que posteriormente se convirtió en Primera Federación.
Experiencia internacional y consolidación en Portugal
Tras el descenso del Deportivo, Montero firmó por el Besiktas turco, donde, aunque no se afianzó como titular, logró hacerse con el triplete. A continuación, su carrera lo llevó al Hamburgo en la Bundesliga 2 y, finalmente, al Arouca de la liga portuguesa, donde sí encontró la estabilidad que buscaba. En Portugal, Montero se consolidó con 29 titularidades, despertando el interés del Racing de Santander, que lo incorporó para fortalecer su defensa.
Un Javi Montero muy diferente al que estuvo en el Deportivo
Tras conseguir rescindir este verano con el Besiktas, una operación que según él mismo indicó no fue nada fácil, explicó que el Racing de Santander se encontrará un futbolista muy distinto. «Ya tengo mucha más experiencia. He estado mucho tiempo fuera y la verdad que soy un jugador diferente, con mucha más experiencia, con cinco años más. La verdad que soy otro jugador».
Montero ha destacado que aún le queda tiempo para alcanzar su mejor versión tras semanas de adaptación en Santander: “Soy un jugador al que le gusta trabajar, soy fuerte y rápido, aunque me falta un poco para estar a mi nivel óptimo”. El próximo encuentro entre el Deportivo y el Racing de Santander pondrá a prueba al central, que retorna a Riazor con una visión y un estilo renovados.