Este martes, la Ciudad Deportiva de Las Rozas acogió el sorteo del play-off de ascenso a la Liga Iberdrola. Un play-off que arrancará este mismo fin de semana, coincidiendo con las Elecciones Generales. Un dato este último que, a priori, poco tiene que ver con el fútbol. Y cabe matizar el a priori porque, para María Requena, pieza clave en los esquemas del Alhama, próximo rival del Deportivo Femenino, tiene relación directa. Además del partido, la mediocentro valenciana este domingo tendrá otro cometido: será suplente del presidente en el colegio electoral de su pueblo, Aielo de Malferit.
Semanas atrás, María había recibido la notificación oficial que la convocaba para el proceso electoral. Sin embargo, en ningún momento se le pasó por la cabeza que en su agenda podría solaparse con otro evento. En parte, porque su equipo aún no había confirmado su plaza en la fase de ascenso, en parte, porque, aunque se diese, no tenía claras las fechas. “No fui consciente hasta el domingo pasado después de certificar en Aldaia nuestra presencia en el play-off”.
Justo ahí, en ese momento, con ese golpe de realidad, empezaron las preguntas y las dudas. “Más que fastidiada, estaba nerviosa. Tenía la esperanza de que nos tocase en casa y las cosas saliesen bien, pero desde el domingo hasta el sorteo del martes estuve en tensión, informándome para ver cómo podía justificarlo». Requena quería buscar un argumento que la respaldase para poder ausentarse del colegio electoral, pero esa opción se fue esfumando: «Vi que no se podía hacer nada”.
Pendiente de la bola del sorteo, cuando comprobó que el Alhama salía de primero y jugaba como local, recuperó el aliento. No tenía que viajar, el domingo podía estar en casa, no estaba todo perdido. «Fue una sensación de calma un poco tensa«, pronuncia entre risas. Y se explica: «Estoy más calmada porque sé que es aquí el partido y que puedo llegar a tiempo -de Aielo a Alhama de Murcia hay 190 kilómetros-, pero sigo en tensión un poco de decir: ‘Estoy dando por hecho que mi presidente va a ir al colegio electoral, pero si ocurriese cualquier cosa rara o si él no acude, me fastidiría, y me perdería el partido’».
Con esa incertidumbre que le va a acompañar hasta el mismo domingo por la mañana, la futbolista valenciana lanza un último mensaje repleto de sinceridad: «Me parece injusto que no haya justificación para el fútbol femenino ni para cualquier otro deporte que no sea el fútbol masculino de Primera División. Que te puedas quedar sin un premio así porque, de todos los habitantes de tu ayuntamiento, te toque a ti ser la elegida para estar todo el día en las mesas y que no tenga solución…”, concluye contrariada.
Sobre el partido
María intenta escapar de lo que no está a su alcance, prefiere centrarse en lo puramente futbolístico, y reflexiona: «Va a ser un partido difícil, vamos a tener que hacer un partido muy completo para sacar un buen resultado, porque nos enfrentamos al favorito. Todas las quinielas apuestan a que el Deportivo el año que viene va a estar en la Liga Iberdrola. Y más cuando se enfrenta a un equipo de la Región de Murcia con un presupuesto 3 o 4 veces más pequeño que el de cualquier otro equipo que vaya al play-off. Sabemos que es un partido muy importante, que vamos a tener que hacer las cosas muy bien para sacar algo positivo e ir con opciones a Galicia».
En su caso particular, no será el primer play-off que dispute, el curso pasado ya hizo lo propio con la elástica del SPA Alicante: «Son partidos muy bonitos de jugar, al final todo el mundo quiere jugar en Primera División, es el nivel top, pero jugar un play-off significa mucho esfuerzo, significa estar toda la temporada trabajando para que al final obtengas una recompensa y que en 180 minutos pueda pasar cualquier cosa». A la espera de lo que suceda en las urnas, María Requena lo tiene claro: «Tengo ganas de disfrutarlo, no quiero pensar más allá«.