El técnico herculino espera que ante el Elche exista «un ambiente de unión» donde «haya cordura en todos». Recalcó que su deseo es que «seamos conscientes de lo que nos jugamos».
«Espero que haya un ambiente de unión, con cordura y que seamos conscientes de lo que nos jugamos. El Deportivo y su afición está por encima de todo». Se puede decir más alto, pero seguramente no más claro. Ese es el deseo de Víctor Fernández en el partido del próximo lunes ante el Elche, donde el Deportivo se juega tres puntos con un rival directo por la permamencia.
Y es que el técnico maño destacó que será un duelo de máxima importancia. «Los puntos a partir de ahora tienen un valor incalculable, nos faltan por conquistar 30 puntos. Ante el Elche es un partido donde tenemos un rival directo en la misma situación que nosotros, mismo estado y misma necesidad. Eso incrementa la importancia del mismo, cuanto antes consigamos puntos, mucho mejor», destacó.
Así como retiró a Sidnei en la última parte del entrenamiento por precaución, por eso la lista es de veinte jugadores, reconoció que Fariña está para jugar, aunque seguramente no todo el partido. «Ha hecho muy buenos entrenamientos, lleva ocho o nueve días con muy buen ritmo. No es lo mismo entrenar que competir, la alta competición es muy exigente, pero creo que podrá responder. No se cuánto tiempo podrá jugar, pero es muy importante».
En cuanto a su situación personal y el posible ultimátum si se pierde, Víctor Fernández se mostró tranquilo. «Tengo que afrontar la situación son serenidad, firmeza, de pie, muy centrado en mi trabajo. No puedo perder la energía en lo que no puedo controlar, debo hacerlo en lo que puedo como entrenador. Todos sentimos dolor por cosas que están ocurriendo alrededor del grupo, pero hay que ser profesional y responsable con lo que uno lleva».
«Todos los entrenadores tenemos fecha de caducidad. Yo solamente me planteo un escenario, que es que voy a ganar. A partir de ahí no se qué ocurrirá a los dos días, dos meses o dos años. En mi cabeza solo pienso en ganar», agregó.
Lanzó un mensaje de unidad, algo que espera ver en Riazor el lunes. «El rival del Dépor no somos nosotros, el rival del Dépor son los contrarios que llevan una camiseta diferente y luchan por el mismo objetivo. Nosotros no debemos pelearnos, somos como una familia que en estos momentos no hay coincidencias».
