El entrenador blanquiazul solo piensa en la victoria ante el Levante y en lograr la permanencia, un objetivo que será más fácil de lograr con el ambiente que habrá en Riazor y que «ya se respira en la ciudad».
Víctor Sánchez del Amo es feliz en el Deportivo, y su objetivo es crecer como entrenador en A Coruña y en Primera División, algo que solo podrá realizar si su equipo gana mañana al Levante. Para ello, no vale de nada mirar atrás, ni siquiera a las grandes gestas que él mismo protagonizó como futbolista.
«Todo lo que has hecho antes es un recuerdo, una vitrina… Pero el presente es lo que te marca el camino al futuro, y a mí lo que me apetece es seguir creciendo, seguir dibujando un futuro muy bonito en este magnífico club y con estos jugadores», comentó el preparador herculino en la sala de prensa de Riazor.
El técnico blanquiazul se mostró confiado del «buen trabajo realizado durante toda la semana», ya que tanto el cuerpo técnico como los jugadores deportivistas han preparado el partido ante los granotas «de la mejora manera posible» y en función «a que el rival ha manejado dos sistemas durante lo que va de temporada». Sin embargo, lo más probable es que Lucas Alcaraz mantenga el planteamiento de tres centrales que tan buenos resultados le ha dado en las últimas jornadas.
Preguntado por si aparecerá la ansiedad en caso de no marcar pronto el primer gol, el preparador madrileño dejó claro que «no se pueden empezar a imaginar ya situaciones negativas». «No va con nosotros. Preparamos los partidos para intentar ganarlos en 90 minutos. El vestuario recibe el partido con un sentimiento de oportunidad. Es una oportunidad más que una amenaza, y lo enfocamos desde la posición positiva», agregó.
El ‘míster’ deportivista se mostró contento por «el fantástico ambiente que ha habido entre la afición y el equipo durante las últimas semanas», y aseguró que la causa principal es que los suyos están demostrando «la garra que ha sido siempre característica de este club».
«Aquí en Riazor, con esos elementos, tenemos muchas más posibilidades de obtener la victoria. Sabemos que el público estará arropando, que está todo vendido, y seguro que la gente hará un esfuerzo por venir antes para animar al equipo durante el calentamiento. Ese ambiente ya se respira en la ciudad«, explicó.
Sobre si en el banquillo blanquiazul se verá alguna radio o algún móvil para que sus hombres puedan estar pendientes de lo que ocurra en el resto de la jornada, Víctor manifestó que él no es «de prohibir», aunque considera que tiene que «haber unos comportamientos lógicos» y que el Deportivo tiene que estar «a su partido y a nada más», ya que conocer el resto de resultados «no puede variar nada».
Por último, el entrenador herculino reiteró la «sensación muy extraña» que tuvo -y que aún tiene- tras el encuentro de San Mamés, en el que, bajo su punto de vista, sus jugadores merecieron más. «La parte positiva es que el equipo volvió a demostrar que sabe reaccionar, aunque queremos mejorar en eso para por fin poder adelantarnos y conseguir la victoria», concluyó.