Villares, capitán del Deportivo, atendió a los medios en zona mixta tras la derrota blanquiazul en El Sardinero. Para el centrocampista, el Dépor «cometió varios errores que penalizaron bastante», lo que puso el partido «muy cuesta arriba con ese 2-0» para el equipo herculino.
El Deportivo reaccionó, pero no fue suficiente para rascar un punto de su visita a Santander. «En la segunda parte estuvimos mucho mejor, con más control y peso en el partido. Una pena no haber podido ganar puntos. Con un gol nos metimos en el partido, pero una pena que no pudiera llegar antes para tener más minutos con lo que buscar el empate». «Ahora mismo estamos jodidos, es con lo que te quedas después del partido. Pero durante la semana tendremos tiempo para pensar más fríamente y pensar en el próximo domingo», explicó Villares.
El VAR, protagonista de nuevo en un partido del Dépor
Preguntado sobre el VAR, que una vez más fue clave en el devenir del encuentro, Villares fue escueto. «Parece que no tenemos una buena relación, pero para algo está. Lo dejo ahí». Sobre la acción polémica del día, que acabó con gol a favor del Racing, Villares señaló que no pudo hablar con Helton, el protagonista de la misma. «No hablamos, solo vi repetida la jugada, lo que pude ver detrás del árbitro. Para algunos será falta, para otros no. Pero si lo pita… A principio de temporada estábamos con la interpretación, pero eso depende de cada árbitro. Del que está en el VAR y del principal»
¿Se puede hacer larga la temporada para el Dépor?
«Nos quedan cinco partidos en los que hay mucha gente deseando tener minutos. Como equipo, para mejorar y seguir cogiendo sensaciones, que siempre es importante». Hoy tuvieron minutos precisamente algunos de los menos habituales, como Hugo Rama y Genreau. «Sus compañeros y cuerpo técnico sabemos de lo que son capaces porque los vemos todos los días. Hoy, por suerte, han podido demostrarlo. Una pena que no hayamos podido empatar» Finalmente, sobre el ambiente festivo del Sardinero, Villares simplemente comentó que «son momentos. Unos días te toca a ti y otros días le toca al rival. Es lo bonito del fútbol».