Adrián Guerrero es uno de los fabrilistas que se ha convertido, en estas últimas semanas, en un habitual en los entrenamientos del primer equipo. El extremo formado en la cantera de Abegondo es uno de los grandes proyectos blanquiazules de cara al futuro. En rueda de prensa, reafirmó la clara apuesta que está teniendo el Dépor con la cantera vista desde sus propios ojos. Además, aseguró estar cumpliendo el sueño de poder entrenar con el primer equipo y se mostró ilusionado con la posibilidad de debutar en el fútbol profesional en estos últimos partidos de Liga.
La apuesta del Dépor por la cantera
«El Dépor está teniendo una apuesta por la cantera muy clara, así se demuestra con todos los compañeros que llevo viendo en la cantera bastante tiempo y han llegado arriba. Eso es un incentivo para darlo todo y poder conseguir estar ahí con ellos».
Dar el máximo en los entrenamientos para ver si llega el premio
«Es un sueño poder estar entrenando con el primer equipo después de pasar once años en todas las categorías del fútbol base. Con mucha ilusión para ayudarles en lo que sea. Si se da el premio con muchas ganar para hacerlo lo mejor que se pueda».
«Estoy aquí para ayudarles en lo que sea. Voy a dar el máximo en lo que me necesiten».
El sueño de jugar en Riazor
«Son unos clubes excepcionales y son unos estadios, tanto el del Zaragoza como Riazor, en los que es un sueño jugar. Con las máximas ganas. Sea contra el que sea al máximo».
«Eso se verá, nosotros no sabemos nada. Solo pensamos en el día a día, en hacerlo lo mejor posible en los entrenos para que el míster pueda contar con nosotros».
«Con muchas ganas, estando todos ahí para poder ayudar en lo que sea. Preparados para si se da la oportunidad aportar al equipo en lo que se pueda«.
Un entrenador ya conocido
«Con Óscar estuvimos a principio de temporada y muy bien. Es un entrenador excepcional, muy cercano. Es un privilegio tenerlo ahí. En los entrenos, como cuando estaba en el Fabril, a darlo todo e intentar hacerlo lo mejor posible».
Una plantilla que les acoge con los brazos abiertos
«La plantilla del primer equipo es superacogedora, desde el primer momento te acogen superbien. Son un grupo excepcional. El míster nos pide que seamos nosotros mismos, que hagamos lo mismo que cuando estamos abajo y que disfrutemos de esta experiencia, que es inolvidable».
¿Cómo se define?
«Soy un extremo que encara, que va hacia delante y que busca crear situaciones de peligro en todo momento».
El premio a la temporada del Fabril
«El playoff fue un premio a la temporada que hicimos. Aunque fuese una semifinal era como una final. Intentamos hacerlo lo mejor posible pero no se dio. El ambiente está bien, pero bueno…»
Siguiendo al juvenil desde la distancia
«Con el juvenil no puedo bajar pero voy a estar siguiéndolos. Tienen un equipazo, ojalá lleguen lo más lejos posible, que estoy seguro de que lo van a hacer«.