Ainhoa Marín, jugadora del Dépor Abanca, valoró en A Balón Parado de RiazorTV el buen momento que vive el equipo blanquiazul después de convertirse en campeonas de invierno. La delantera, goleadora en el último partido ante el Granada, comentó también los métodos de Irene Ferreras y cómo está viviendo su segundo año en A Coruña.
La revancha contra el Cacereño
«La verdad es que sí. El momento allí en Cáceres (derrota por 4-0) fue un poco doloroso. Ahora llegamos en buenas condiciones a Abegondo para que podamos crecer. Hemos evolucionado y podremos demostrarle al Cacereño que no somos esas jugadoras que fueron a su campo y perdieron por goleada».
Buenas sensaciones tras ganar en Granada
«La verdad es que tanto yo como el equipo teníamos claro que queríamos quitar ya de encima esa idealización de que el Dépor Abanca no ganaba fuera de casa. Queríamos demostrar que claro que ganamos. Jugamos igual que en Abegondo pero en otras cosas nos estaba costando en pequeños detalles. Los primeros minutos los vi asustada porque llegó el Granada con todo. La gente de arriba eran aviones y Lucía nos salvó. No metieron de milagro. Nos vino bien para despertar. Aunque no jugásemos con nuestros mejor fútbol esos tres puntos se necesitaban«.
Saber gestionar los resultados
«Lo bueno que tiene Irene es que incide mucho en estos temas. En lo que puede ser que no sea un sistema de juego. Mete muchas indicaciones para momentos en los partidos en los que hay que saber jugar con el resultado a favor. Hay muchas jugadoras que esto no lo tenían interiorizado por falta de experiencia. Que con un resultado a favor puedes conceder faltas al borde del área, aguantar el balón en el córner… Son cosas que Irene nos está enseñando en los entrenamientos y se agradece porque al final son las pequeñas cosas que van a hacer que el Dépor Abanca esté arriba«.
Su gol contra el Granada
«Se lo comentaba a mis padres cuando me llamaron. Todos mis goles son iguales. Es un balón que mandan, lo cojo y lo meto. Lo que me pasó fue que me mandaron el balón y parecía que llegaba yo con ventaja. Pero, en el último momento la central se tira al suelo, me llevo el rebote y cuando llego a portería solo estaba mirando a Carlota. De repente escucho a una rival del Granada que dice en alto «¡Pero tapa la portería!». Ahí sin mirar tiro fuerte al palo corto y viendo la repetición sí que se ve que la portera no lo está tapando y la central está tapando el área cuando haber venido a por mí».
El estilo de juego de Ainhoa Marín
«A veces pienso que me excedo de tanta explosividad y a veces incluso de aguantar el balón. Estoy intentando crecer en ese sentido, que son esas pequeñas cosas que estoy intentando mejorar porque sé que al final me va a beneficiar a mí. Hago acciones súper explosivas y me canso muchísimo. Sé que no es un tema de que no esté bien físicamente. Considero que estoy intentando mejorar en eso para beneficiar a todo un colectivo».
Su relación con Henar Muiña
«Tanto ella como Laura están bien después del susto del otro día. Henar el otro día estaba tirada en el suelo tras el golpe y cuando Irene avisó del doble cambio Henar saltó corriendo gritando «¡A mí ni se te ocurra cambiarme!».
«Henar es una jugadora que siempre quieres tener en tu equipo y nunca como rival. Me acuerdo que el año pasado jugamos contra el Racing y ella era la única que me acuerdo por lo que molestaba. Es una jugadora que por cómo entrena te hace constantemente ser mejor. Tienes que estar siempre alerta porque va a venir y te va a arrasar. Tus movimientos tienen que ser muy rápidos. O me hago fuerte o tengo que pensar en ir antes que ella. La verdad es que mola mucho entrenar con ella por estas cosas».
Su experiencia con el gallego
«Estoy estudiando aquí en la universidad y hay profesores que no te hablan en castellano, te hablan en gallego. El año pasado no entendía nada, pero a base de que te envíen textos, leas en gallego, te cueste… ya de algo me entero. El viernes pasado tuve un examen que yo pedí en castellano pero me encuentro que es en gallego. Veo un texto de tres páginas que me lo puedo traducir pero que luego esté equivocada para luego responder a las preguntas. No pude llegar al entrenamiento porque estuve dos horas leyendo esa pregunta del examen«.