En las últimas semanas hemos visto cómo los clubs de Primera y Segunda División se han puesto manos a la obra para minimizar todo lo posible el impacto económico de la crisis sanitaria del COVID-19. La mayor parte, con el respaldo de LaLiga, han optado por la opción de poner en marcha ERTEs y negociar con sus jugadores rebajas de salarios, algo que ha causado algún que otro roce. Pero otros han buscado soluciones más creativas, como es el caso del Almería, que este jueves anunciaba que adelanta las vacaciones de la primera plantilla y del filial.
En un comunicado, el conjunto andaluz afirma que ha llegado a un acuerdo «para que el período de vacaciones que, por convenio, tienen jugadores y técnicos se inicie ahora hasta el día 3 de Mayo, volviendo al trabajo en lo próximo día 4». También se asegura que todos los futbolistas han estado ejercitándose de forma individualizada hasta ahora y que así lo seguirán haciendo durante este espacio de tiempo, lo que le permitiría estar en forma en caso de que regresara la competición.
Esta decisión le concede al Almería cierto margen a diferentes niveles. Primero en el laboral. Es probable que la competición tenga que disputarse en los meses de junio, julio e incluso agosto, por lo que el calendario se comprimiría y el tiempo de descanso hasta la siguiente tuviera que ser más corto de lo habitual. El convenio establece que los futbolistas tienen derecho a 21 días de vacaciones, lo que podría causar conflicto. De esta forma resuelven ya uno de los problemas que podrían planteársele a otros equipos.
Ganar tiempo en lo económico
Al mismo tiempo, el club que de Turki Al-Sheikh se permite ganar tiempo antes de tomar ninguna decisión en el plano económico. Hasta ahora, el porcentaje de reducción de salario de los jugadores ha variado dependiendo de los diferentes equipos, en parte porque es complicado hacer una estimación exacta de las pérdidas que supondrá el parón. Esos cálculos podrán ser mucho más precisos dentro de un mes en caso de que el Almería quiera explorar entonces la opción de los recortes o incluso de los ERTEs.